La protesta de los médicos de hospital acaba en los tribunales

Lejos de resolverse, la protesta de los médicos de hospital acabará en los tribunales. El conflicto (huelga de celo según Osakidetza y "optimización" del trabajo, para los facultativos) que la pasada semana causó aglomeraciones en los servicios de Urgencias de Cruces y Galdakao será visto por un juzgado de lo social el 18 de enero.

La reunión de ayer del Preco (el servicio de resolución de conflictos) fue un fracaso: los sindicatos reiteraron en defender el principal motivo de la protesta, la consideración de las guardias como horas extraordinarias, mientras que Osakidetza insistió en que son sólo una prolongación de la jornada."El tema ya está planteado como un conflicto colectivo que se judicializa", afirmó, tras la breve reunión del Preco celebrada en Bilbao, la responsable de Sanidad de ELA, Izaskun Garikano. "Como en otros asuntos, puede prolongarse durante varios años", vaticinó Ana Pérez, delegada sindical de UGT. Las resoluciones de los juzgados de lo social suelen ser rápidas pero, con los previsibles recursos de la parte perdedora, el fallo definitivo se demorará.

La reunión del servicio de mediación de conflictos, a la que acudieron sindicatos, la Federación de Facultativos -la asociación que protagoniza la protesta-, el Sindicato Médico y un representante de Osakidetza apenas duró un cuarto de hora, porque cada parte mantuvo sus posiciones. El consejero de Sanidad, Gabriel Inclán, se había mostrado confiado el pasado viernes en lograr un acuerdo pero entonces ya rechazó las reivindicaciones de los facultativos sobre las guardias.

Los portavoces de los médicos de hospital (un colectivo de 3.000 profesionales entre los 26.000 empleados de Osakidetza) se reúnen hoy en Vitoria para analizar la situación tras su protesta. Acudirán representantes de los nueve hospitales que han secundado la denominada "optimización" -pedir más pruebas diagnósticas o demorar las altas, entre otras iniciativas-: los centros vizcaínos de Cruces, Galdakao, Santa Marina y San Eloy; el complejo Donostia y los hospitales Zumarraga, Arrasate y Mendaro en Guipúzcoa; y el de Txagorritxu, en Vitoria.

Críticas a Osakidetza

Pedro Aspizua, portavoz de la Federación de Facultativos (única entidad que representa exclusivamente a los médicos de hospital vascos), afirmó ayer que se analiza la situación del centros y la "desinformación de [la dirección de] Osakidetza". Aspizua se mostró muy crítico con las declaraciones de los responsables sanitario "que hablan de la subida de las guardias pero se olvidan de una sentencia judicial que dice que cuando superamos las 1.592 horas [anuales], el resto son extraordinarias". Los médicos de hospital aseguran que el colectivo está "muy cabreado y decepcionado" por los "intentos" de Osakidetza de "echarnos a la gente encima". La pasada semana, el director general del Servicio Vasco de Salud, Josu Garai, les reprochó que estaban utilizando a los pacientes como "rehenes".

Aspizua dijo que hoy se estudiará también la posibilidad de adoptar nuevas medidas pero incidió en que los médicos no colapsarán el sistema de atención sanitaria. Como expresaron la pasada semana, su iniciativa de mejora de la atención será "paulatina" con el fin de que se "pongan al descubierto las deficiencias estructurales o de diseño" de la Sanidad vasca.