_
_
_
_
OPINIÓN DEL LECTOR
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Ya tenemos titular

Estos días estoy sobrecogido por la noticia de los dos niños que han quedado huérfanos en un odioso accidente de tráfico y que fueron rescatados por un camionero.

Si noticia es aquello que se sale de lo normal, me pregunto qué tiene de especial, para que destaque entre tantas tragedias de carretera.

Hay muertos, hay héroes y hay niños y el culpable muere. Una historia para estas fechas de Navidad. Una historia rentable y jugosa para mucha gente.

Si se difumina un poco la figura del conductor que provoca el accidente; si se le llama kamikaze y se pasa de puntillas por su personal sufrimiento y el de su familia, cargando las tintas de lo sentimental sobre la "familia inocente".

En estos mismos días, estoy especialmente sensible como ciudadano de Pozuelo de Alarcón, que no comprende los mecanismos de la información.

Qué ingredientes le faltan a la mayoría de las noticias para que pasen por la criba y se nos informe sobre ellas. ¿Por qué no puede alcanzar el grado de noticia el que dos policías municipales corruptos hayan sido condenados por la Audiencia Provincial de Madrid y el propio Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón?

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

El Tribunal Supremo condena a varios años de cárcel a estos policías corruptos, por los delitos de atentado, lesiones, tortura.

Esto no es algo habitual, pero no parece merecer ni un modesto titular. Tampoco es habitual que el concejal de Seguridad y su alcalde no abriesen un expediente sancionador ni tomasen ninguna medida preventiva en su momento. Y es mucho menos habitual que uno de estos policías fuera ascendido a sargento al poco tiempo. En esta noticia hay policías corruptos, concejales y alcaldes consentidores, que miran para otro lado. Es cierto que no hubo muertos, aunque sí hubo torturas, sangre y amenazas de muerte; pero sí hubo un héroe: un policía nacional que llegó a tiempo para evitarlo. Quizá ante una dimisión habría noticia, pero eso es impensable, como es esperar un gesto de perdón a las familias y a los vecinos por nuestra Corporación.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_