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La conservación de los 149 túneles, pasadizos y pasos elevados cuesta 1,6 millones al año

La capital tiene ya 54 vías subterráneas, que suman 24 kilómetros, para vehículos

Madrid tiene 54 túneles (que suman 24 kilómetros) y 39 pasos elevados para coches, además de 32 pasadizos y 24 puentes peatonales. En total, 149 estructuras cuya conservación y sistemas de seguridad costarán al Ayuntamiento el año próximo 1,6 millones de euros. A ésta hay que sumar una cifra idéntica para mantener los 100 kilómetros de galerías de servicio que surcan el subsuelo y acogen canalizaciones de agua, luz y teléfono. Esas galerías y los siete principales túneles de la ciudad están vigilados desde un centro de control durante 24 horas todos los días del año.

El gobierno municipal aprobó ayer un gasto de 3,3 millones de euros destinado a la "conservación integral de las galerías de servicio y los pasos a distinto nivel (túneles y pasos elevados)" de la capital en 2005, según anunció el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón.

Las galerías de servicio, que suman 100 kilómetros, son unas estructuras subterráneas por las que discurren canalizaciones de servicios básicos y que los operarios visitan periódicamente para reparar averías o controlar el buen estado de las instalaciones.Sólo existen bajo ciertos tramos de algunas calles de Madrid -unas 70 de un total de 12.700-, como Bailén, Príncipe de Vergara, Gran Vía, Preciados y la Castellana. En el resto de la ciudad los cables y cañerías van directamente enterrados en el subsuelo; por eso, cuando se produce una avería las compañías tienen que levantar el pavimento, abrir la consabida zanja, reparar la canalización y volver a cerrar.

Ruiz-Gallardón aseguró que estas galerías están dotadas de "los más avanzados sistemas de seguridad": cuentan con detectores de incendios y de gases que, de forma ininterrumpida, transmiten al centro de control cualquier alteración en la concentración de dióxido de carbono, oxígeno, sulfhídrico o metano, y accionan una alarma cuando la temperatura supera los 70 grados o hay una variación térmica instantánea superior a los siete grados.

Los accesos están controlados con cerraduras digitales y todas las galerías cuentan con cámaras de televisión que envían las imágenes a un centro de control del Ayuntamiento que funciona 24 horas los 365 días del año. "Es un sistema de seguridad muy sofisticado y muy caro, pero necesario", explica Fernanda Serrano, directora general de Obras de la Concejalía de Medio Ambiente.

El mismo centro de control desde el que se controlan las galerías recibe las imágenes de todo lo que ocurre en los siete principales túneles de la capital: Santa María de la Cabeza, Pío XII, María de Molina, Ríos Rosas, Cristo Rey, Sinesio Delgado y Costa Rica. Entre los siete suman 6,2 kilómetros; pero en la ciudad hay 47 túneles más, hasta un total de 24 kilómetros de pasos inferiores, según los datos de la concejalía.

Si en lugar de avanzar bajo tierra los conductores prefieren evitar los atascos elevándose sobre el nivel de la calzada, Madrid ofrece 39 pasos elevados para vehículos. Y la lista de pasos a nivel se completa con 32 pasadizos subterráneos para peatones y 24 puentes también peatonales. Conservar en buen estado todos estos túneles y pasos elevados costará el año próximo 1,6 millones; y otro tanto se comerán en seguridad las galerías de servicio.

Calle 30, empresa mixta

El gobierno municipal dio ayer el primer paso para convertir la empresa pública Madrid Calle 30, encargada de la reforma de la M-30, en sociedad mixta (con un 20% de capital privado). Un proceso que culminará dentro de cinco o seis meses con la entrada del socio privado, aún desconocido.

El alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, explicó que el pleno municipal del próximo jueves autorizará al Ayuntamiento a elaborar los nuevos estatutos de la empresa y los pliegos de condiciones del concurso que adjudicará ese 20% del capital a una firma privada a mediados de 2005.

La reforma de la M-30 costará 4.000 millones, pagados con préstamos bancarios. El Ayuntamiento devolverá el dinero en plazos durante 35 años.

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