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PANTALLA INTERNACIONAL

Sean Connery y Alejandro Magno protagonizan el festival de Marraquech

'Alexander', de Oliver Stone, fue rodada en Marruecos con apoyo del Ejército Nacional

Alexander, la polémica hagiográfica sobre Alejandro Magno dirigida por Oliver Stone, ha sido presentada en sesión de gala en el festival de cine de Marraquech. Es lógico que así haya sido dado que buena parte de la película fue rodada en Marruecos, con amplio apoyo de la monarquía alauita. El pasado año, en este mismo festival, a Stone le entregaron una condecoración especial del rey Mohammed VI, que premiaba su interés por utilizar los bellos paisajes del país, y por difundir las facilidades que da el Gobierno para que en Marruecos se rueden películas. Y no son pocas. A Oliver Stone, por ejemplo, le permitieron utilizar el Ejército Nacional para hacer bulto en las escenas de batallas que, por cierto, son numerosas.

En sus casi tres horas de duración, Alexander podría dar para bastante más de lo que contiene, pero son las secuencias de batallas las preferidas de Oliver Stone, aunque ello no signifique que estén bien contadas. El director ha optado por ese bien conocido estilo trepidante de la televisión moderna, con el que es fácil acabar mareado y sin entender lo que se está viendo. Alexander venía precedida de malas críticas tras su estreno en Estados Unidos. El público del festival de Marraquech pareció estar de acuerdo con ellas, a juzgar por las deserciones durante la proyección o por el rutinario aplauso final. Alexander es cine de espectáculo, con discurso ambiguo, personajes difusos, acción reiterativa, y sin emoción. ¿Es hoy Alejandro, como parece darse a entender, un ejemplo para el mundo porque conquistó por las armas medio planeta? ¿Qué opinaban sus generales amotinados, que en la película quedan reducidos al esquema de buenos y malos? ¿Qué interés dramático tienen los insinuados esparcimientos homosexuales de Alejandro más allá que el de provocar un tonto escándalo entre unos profesores griegos, hábilmente utilizado, eso sí, por el marketing de la productora? ¿Qué significan las referencias a Bush que hace Stone en las entrevistas? ¿Una crítica, un guiño, oportunismo...? Alexander llegará pronto a las pantallas españolas, y tiempo habrá para comentarla. De momento, en Marraquech parece haber decepcionado.

El festival fue inaugurado el pasado lunes con Crimen ferpecto, de Álex de la Iglesia, única participación española. Hubo algo de desconcierto cuando los presentadores reclamaron desde el escenario la presencia del director, sepultado en ese momento por una plaga de fotógrafos que perseguían a las estrellas de la noche, sentadas a su lado: el director egipcio Yuseff Chahine, la actriz de origen tunecino Claudia Cardinale, y los componentes del jurado que preside Alan Parker, entre ellos, Valeria Golino, Laura Morante, Chantal Akerman... Álex de la Iglesia no pudo oír que le estaban reclamando. Cuando se sintió libre, prefirió respirar en la calle. No recibió, pues, las risas y los aplausos finales.

Otro premio ha sido entregado "al conjunto de una carrera", nada menos que a Sean Connery, a quien no parece haberle hecho gracia el que las películas elegidas para remarcar el homenaje correspondan a su etapa de James Bond, de la que prefiere olvidarse.

El productor Thomas Schuhly y el director Oliver Stone (a la derecha), en Marraquech.
El productor Thomas Schuhly y el director Oliver Stone (a la derecha), en Marraquech.ASSOCIATED PRESS
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