Una titulación universitaria española será necesaria para enseñar islam

Los docentes que impartan clase de religión islámica en la escuela deberán tener un título universitario cursado en España, haber recibido un curso sobre ordenamiento jurídico español y "hablar en perfecto castellano". Esos son los requisitos que pedirá la Comisión Islámica de España, cuyo presidente, Riay Tatary, se entrevistó la semana pasada con la directora general de Asuntos Religiosos, Mercedes Rico. Tras cumplir esas exigencias, la Comisión propondrá a la Administración los profesores que ocuparán las plazas ofertadas en las escuelas en aquellas ciudades con mayor presencia de población musulmana.

A mediados de noviembre el Gobierno anunció que el próximo año se ampliará la plantilla de estos docentes, que hasta ahora sólo tenían plaza en los colegios de Ceuta y Melilla. Andalucía, Cataluña, Madrid y la Comunidad Valenciana serán las regiones con más presencia de estos profesionales.

Tatary insistió en el interés de la Comisión Islámica en que los profesores que se encarguen de estas enseñanzas sean idóneos e impartan el Corán de acuerdo a los valores constitucionales y los derechos humanos. Y censuró las "posturas reaccionarias" reacias a la presencia del islam en las escuelas.

La Iglesia católica exige a aquéllos que imparten esta doctrina en los colegios españoles dos acreditaciones: la Declaración Eclesiástica de Idoneidad (DEI) y la Missio canónica, certificados de conducta religiosa ajustada a los deseos de la jerarquía católica.

Imagen correcta

En su visita a la directora general de de Asuntos Religiosos, Tatary pidió la colaboración del Gobierno para trasladar a la sociedad española "una imagen correcta sobre la realidad del islam y la comunidad musulmana", separada de ideas ligadas a la violencia, el terrorismo, la inseguridad ciudadana, la violencia sexista o la discriminación de las mujeres".

Esta demanda va unida a la polémica suscitada por la excepción que establece el Reglamento de Extranjería para los imanes, que no deberán acreditar un permiso de trabajo para obtener la residencia en España. Sobre esto, aseguró que la comisión realiza un "seguimiento" de los imanes con el fin de garantizar que no están relacionados con actividades delictivas. "Estamos intentando que la Dirección General de Asuntos Religiosos sea explícita en su mensaje. Hay un registro que abarca todas las mezquitas y los musulmanes son ciudadanos que cumplen todos sus deberes", asegura Tatary.