El general serbio que atacó Sarajevo se entrega a la justicia de la ONU
El general serbobosnio Dragomir Milosevic, acusado de crímenes de guerra por dirigir los bombardeos contra Sarajevo entre 1992 y 1995, se entregó ayer en Serbia a la justicia para ser transferido ante el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY), creado por la ONU en La Haya, según anunció en la capital bosnia la fiscal Carla del Ponte.
El general Milosevic, antiguo comandante del Cuerpo de Romanija del Ejército serbobosnio, está acusado por el TPIY de crímenes contra civiles durante el asedio de Sarajevo. Del Ponte reiteró en la capital bosnia que el TPIY sigue exigiendo la detención de los antiguos líderes serbobosnios Radovan Karadzic y Ratko Mladic, acusados de genocidio y otros crímenes de guerra.
"Este tribunal no cerrará sus puertas antes de que Karadzic y Mladic sean procesados", afirmó la fiscal Del Ponte, que volvió a denunciar que las autoridades del ente serbobosnio siguen sin cumplir sus obligaciones de cooperación con la justicia internacional.
Del Ponte criticó también a la OTAN por no haber detenido a Karadzic y Mladic durante los nueve años que ha durado su misión, que finalizó el jueves para ser relevada por una fuerza internacional dirigida por la UE.