Un seísmo de 3,5 grados sacude la costa centro del Maresme sin causar daños

El centro de la comarca del Maresme volvió a temblar ayer por la tarde a causa de un terremoto. El seísmo, de magnitud 3,5 grados en la escala de Richter, se produjo a cuatro kilómetros de profundidad en el mar y a otros cuatro frente a las playas de Canet de Mar. Este último municipio y los de Arenys de Mar y Arenys de Munt fueron los que más notaron el seísmo, que no causó daños materiales apreciables.

El terremoto ocurrió a las 19.10 horas. Fuentes del Instituto Cartográfico de Cataluña informaron de que su epicentro estuvo localizado en el fondo del mar. Las mismas fuentes explicaron que en terremotos de esta magnitud no son muy habituales las réplicas, aunque no descartaron esta posibilidad.

El seísmo no causó daños materiales, según confirmaron los Bomberos de la Generalitat y las policías locales de Canet y Arenys. Las centralitas policiales registraron, sin embargo, numerosas llamadas de vecinos alarmados. "Hemos recibido llamadas de personas que viven en pisos altos, asustadas porque se les había caído algún cuadro", relató ayer un agente de la Policia Local de Arenys de Munt. "Aquí, en la comisaría, sólo hemos oído un ruido y el temblor de los cristales. Hemos pensado que era un camión, pero no hemos visto nada", añadió. Fuentes de la policía de Arenys de Mar coincidieron en explicar que el temblor duró sólo pocos segundos y estuvo acompañado de un fuerte ruido, parecido al de una explosión.

Este es el tercer terremoto registrado últimamente en el Maresme y el segundo con el epicentro ante las costas de Canet, después del seísmo que se produjo el 4 de octubre. En aquella ocasión la intensidad fue menor, de 2,4 grados en la escala Richter. El último seísmo importante sucedió el pasado 21 de septiembre en el Ripollès. De 4,1 grados, causó desperfectos en algunos edificios.