Cruce de acusaciones entre Castells y Homs sobre lo que aporta el modelo de financiación

El consejero de Economía y Finanzas, Antoni Castells, y su antecesor en el cargo, el diputado de CiU Francesc Homs, se acusaron ayer mutuamente de confundir a la opinión pública sobre la aportación del modelo de financiación a Cataluña. "Algunas afirmaciones son frívolas y muy poco rigurosas", dijo Castells en alusión a Homs, quien recriminó al consejero su "demagogia" por no admitir las bondades del modelo. La financiación autonómica centró gran parte del debate del presupuesto de la Generalitat de 2005, que se inició ayer en el Parlament con el rechazo, por 60 votos a favor y 70 en contra, a sendas enmiendas a la totalidad presentadas por CiU y el PP.

Homs reiteró que el modelo de financiación pactado por CiU en julio de 2001 es un "buen acuerdo", porque los ingresos derivados de éste aportarán el año que viene 2.058 millones más que en 2004. Este aumento, del 14,1% según el ex consejero, va a permitir el presupuesto crezca el 17,9% en 2005. Pero el consejero de Economía rechazó de plano la tesis de su predecesor en el cargo y explicó que en la liquidación del presupuesto de 2002, el primer año en que se aplicó el modelo de financiación pactado en 2001, "los ingresos aportados por el nuevo modelo crecieron un punto porcentual menos que con el anterior sistema".

El consejero eludió detallar cifra alguna en este sentido y la dejó para la próxima reunión, prevista para el 2 de diciembre, de la parte catalana de la comisión mixta de valoraciones. En el debate del presupuesto de 2004, el consejero avanzó que la aportación se situaría entre 230 y 265 millones de euros más, sólo el 16% de lo anunciado por el anterior Ejecutivo de CiU.

Francesc Homs insistió al afirmar que, según datos del Ministerio de Economía, la liquidación de 2002 da, para Cataluña, 516 millones de euros más.

El consejero aprovechó para aclarar que el aumento que experimentarán en 2005 los recursos derivados del nuevo modelo de financiación (el alza de la participación en impuestos estatales y del fondo de suficiencia) es del 8,2%, y no del 14% como defiende CiU.Tras el cruce de acusaciones y el baile de cifras, el consejero recogió el guante lanzado por Homs para avanzar juntos en un nuevo sistema de financiación, a lo que se sumó, en su defensa de la enmienda a la totalidad, el líder del PP catalán, Josep Piqué.

Antoni Castells negó que las cuentas públicas supongan un aumento de la presión fiscal en 2005 pese a la creación de 18 tasas nuevas (una de las principales críticas lanzadas por CiU y el PP) argumentando que la recaudación prevista para 17 de las 18 tasas establecidas es de 400.000 euros y sólo con una, la de bomberos, se espera recaudar una cantidad superior: 3,5 millones de euros.

Castells defendió que buena parte del aumento de los ingresos de la Generalitat se explica por la "buena gestión realizada en los tributos" que administra el Ejecutivo catalán, que crecerán casi el 18%. Este dato sirvió de argumento al consejero para defender una agencia tributaria propia, en contra del criterio del secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, que se muestra favorable a ello sólo en el caso de los tributos propios.

Por su parte, Homs criticó el proyecto de presupuesto por considerar que es "muy expansivo" y que aumenta de forma importante el endeudamiento con métodos, dijo, "que tanto criticaban desde la oposición" (como el método alemán). El diputado de CiU preguntó a Castells si el momento actual, en vísperas de negociar un nuevo modelo de financiación, es el mejor para alardear de un presupuesto expansivo. "No lo acabo de entender, a no ser que estén pensando en convocar elecciones dentro de poco. Entonces quizá lo entendería, porque los presupuestos crecen de forma importante en vísperas de elecciones", afirmó con sorna Homs.

Por su parte, Josep Piqué tachó las cuentas presentadas por el Ejecutivo catalán de "irreales", "intervencionistas" y poco orientadas al gasto social y a la competitividad. Como ejemplo, constató que el presupuesto del Departamento de Comercio, Turismo y Consumo crece "por debajo de la media, si bien, dado el nuevo consejero [Josep Huguet], es mejor que no gestione más recursos de los necesarios". Este comentario irritó profundamente al diputado Joan Ridao, quien pidió la palabra para exigir a Piqué que retirara la "alusión" a Huguet, cuya "capacidad", en su opinión, había "cuestionado abiertamente".