UGT recuerda que los convenios colectivos asignan el 60% del PIB

Toni Ferrer, secretario de Acción Sindical de la organización federal de UGT, recordó ayer en Valencia que los convenios colectivos constituyen uno de los instrumentos "más potentes de redistribución económica en los países desarrollados ya que prácticamente el 60% del PIB se asigna a través de esta vía". José María Cuevas, presidente de la CEOE, anticipó el miércoles que la patronal solicitará sacrificios salariales para mantener empleo. Pero el responsable de Acción Sindical de UGT abordó la inminente negociación en miles de empresas desde otra perspectiva. Ferrer apostó por "la mejora en la calidad del empleo y la mejora de la competitividad de la economía y las empresas a través de un modelo productivo que recupere la política industrial y desarrolle verdaderas políticas de servicios".

El dirigente de UGT subrayó el "agotamiento" que atenaza el crecimiento de varios sectores tradicionales y planteó la necesidad de incidir en "la inversión tecnológica, la mejora del sistema de educación y formación y el impulso de la política de infraestructuras". La apuesta pretende evitar la creciente tentación de trasladar la producción industrial a países que ofrecen mano de obra más barata y paliar una posible "pérdida de peso económico de la sociedad española" ante el escenario que supone la ampliación de la Unión Europea a 25 miembros.

Rafael Recuenco, secretario general de UGT del País Valenciano, incidió en la batalla por la igualdad salarial de hombres y mujeres en el ámbito de la Comunidad Valenciana y por la necesidad de reforzar la seguridad y prevención de riesgos laborales.

Filibustero

La posibilidad de contratar a 70 técnicos al servicio de la Generalitat para reforzar las plantillas de técnicos en seguridad y prevención fue una de las medidas que plantearon CC OO y UGT en la reunión de la mesa del Plan Valenciano por el Crecimiento y el Empleo que se celebró el miércoles en la Consejería de Hacienda. Recuenco, ayer, tachó de "filibustero" el comportamiento de Gerardo Camps, consejero de Hacienda y anfitrión de la reunión: "Primero nos convoca para informarnos de los presupuestos, después nos emplaza a otra reunión para debatirlos y hacer aportaciones, y cuando nos reunimos, nos dice que ya se ha pasado el plazo".

El dirigente regional de UGT lamentó la escasa importancia que el Consell concede al diálogo social y denunció el impulso presupuestario al traslado de empresas al exterior, una partida que crece un 75% en las cuentas de la Generalitat para 2005.

Gerardo Camps, por su parte, echó más leña al fuego desde Alicante, donde declaró que las modificaciones presupuestarias que plantearon los sindicatos el miércoles incluyen nuevos gastos, pero no los recortes que provocaran en otras partidas.