Tagliabue defiende la pérgola del mercado de Santa Caterina

"Parece que hay algún problema con la pérgola del mercado de Santa Caterina, pero para nosotros es una parte fundamental del proyecto", comentó ayer, un tanto preocupada, Benedetta Tagliabue, responsable del estudio de arquitectura EMBT, que fundó con su marido, el desaparecido Enric Miralles. La comisión de calidad de Ciutat Vella estudiará el proyecto el próximo lunes. Tagliabue presentó un libro que reúne 11 de los principales proyectos realizados por el estudio entre 1991 y 2002.

"Creo que es importante que se entienda que la pérgola era una parte importante del mercado porque lo enlazaba con la avenida de Cambó y la Via Laietana", señaló Tagliabue. Esta pérgola tendrá una estructura metálica con cubierta de madera y, explica Tagliabue, una de sus funciones será impedir que el acceso principal del mercado se llene de coches o camiones.

La espectacular arquitectura del mercado de Santa Caterina -que no abrirá sus puertas hasta febrero o marzo de 2005, ya que aún se está trabajando en la instalación de los puestos del mercado y el pavimento- es uno de los 11 proyectos que aparecen en la monografía EMBT Enric Miralles Benedetta Tagliabue. Work in progress, editado por el Colegio de Arquitectos de Cataluña a modo de catálogo de la exposición sobre el estudio que organizó esta entidad en 2002. El libro incluye un DVD con varios filmes de Bigas Luna sobre el estudio y un artículo inédito de Miralles escrito inicialmente para una revista de flores. Según Tagliabue, la estructura de las flores era un tema que les interesaba mucho en el momento en el que estaban concibiendo varios de estos proyectos y algunas obras se inspiran en formas vegetales.

Entre los proyectos reseñados, con montajes fotográficos y comentarios más literarios que descriptivos del propio Miralles y de Tagliabue, destacan el nuevo Parlamento de Escocia, en Edimburgo, que se inauguró a principios de octubre; el campus universitario de Vigo, que este año ha sido reconocido con un premio FAD, y la nueva sede de Gas Natural en la Barceloneta, que podría estar acabada a finales de 2005. Este último edificio, una torre cuya enorme estructura es ya muy visible desde varios puntos de Barcelona, tendrá una fachada que combinará cuatro tonalidades diferentes de cristal con una ligera curvatura que dará la sensación, indica Tagliabue, de reflejo en el agua.

El estudio está a punto de comenzar la instalación de los paneles de hormigón que semicubrirán la Gran Via y trabaja en un nuevo proyecto, la urbanización del puerto de Hamburgo.