Benach deberá promover la Constitución europea pese a que su partido, ERC, la rechaza

La reciente elección del presidente del Parlament, Ernest Benach, para presidir la Conferencia de Presidentes de Asambleas Legislativas Regionales Europeas (CALRE) le obligará a promover en Cataluña la ratificación de la Constitución europea. En la misma sesión en que fue elegido, la CALRE aprobó también una declaración solemne en la que los parlamentos regionales se obligan a promover los procesos de ratificación de la Constitución europea en sus respectivos territorios. No obstante, Benach, que milita en Esquerra Republicana (ERC), se abstuvo en la votación.

Esta situación coloca a Benach en una flagrante contradicción. Su partido, Esquerra Republicana, se ha declarado rotundamente contrario a la ratificación del tratado europeo y se ha mostrado particularmente activo en el combate contra un texto al que acusa de "ignorar a Cataluña", entre otras cosas. ERC ha trabajado para conseguir que también los partidos nacionalistas con los que se alió para acudir a las elecciones europeas, Eusko Alkartasuna y Chunta Aragonesista, preconicen el no en el referéndum que se llevará a cabo el 20 de febrero, e intenta articular una campaña conjunta de los partidos que rechazan esta Constitución en España para que en el referéndum triunfe el no.

Esta contradicción fue señalada ya en la elección de Benach como presidente de la CALRE, el 26 de octubre en Milán, por algunos presidentes de asambleas regionales. Exigieron garantías de que como presidente de la Conferencia no se dedicaría a defender las posiciones de su partido en un proceso tan importante como la ratificación de la Constitución europea. Sin embargo, Benach logró superar la desconfianza comprometiéndose a mantener una actitud plenamente "institucional y respetuosa" con los acuerdos de la Conferencia, explicó el vicepresidente del Parlament, Higini Clotas, que asistió a la reunión.

La denominada Declaración de Milán adoptada por los presidentes de parlamentos regionales es muy clara acerca de la Constitución europea. La CALRE "expresa su satisfacción" por la aprobación del tratado constitucional por los jefes de Estado y de gobierno, manifiesta que "constituye un progreso en la integración europea" y reclama para ellos un papel activo en su desarrollo. En particular, señalan que los parlamentos regionales tienen que ser quienes se pronuncien cuando se lleven a cabo violaciones del principio de subsidiariedad.

Junto a la declaración se aprobó un anexo por el que los parlamentos regionales se disponen a apoyar la ratificación de este tratado mediante la difusión de su contenido en jornadas de estudio, debates, publicaciones e incorporación del texto a sus páginas web; a implicar a los ayuntamientos y gobiernos regionales en esta tarea y a celebrar una sesión plenaria monográfica sobre la Constitución europea y sus consecuencias para los ciudadanos.

En el caso de Cataluña, el Parlament está dividido acerca de la Constitución europea; pero los diputados favorables a la ratificación son mayoría, aunque no se corresponde con la mayoría que apoya al Gobierno. A favor están la totalidad de los diputados del grupo socialista y del PP; una parte del grupo de CiU, la formada por los diputados de Unió, y a título individual, algunos diputados de Esquerra Republicana.