Un cuadro de Miró se vende en Nueva York por 10 millones de euros
La casa de subastas Christie's de Nueva York inició el miércoles la temporada otoñal de ventas de arte, que en su primera jornada dedicada al arte impresionista y moderno se saldó con 128 millones de dólares en ventas. La pintura La caricia de las estrellas, de Joan Miró, se vendió por 11.767.500 millones de dólares (unos 10 millones de euros), la segunda cifra más alta alcanzada en su historia por una obra del artista, que tiene su récord en una cantidad ligeramente superior.
La pintura de Miró era particularmente codiciada, puesto que se la considera una de las más significativas de las pintadas durante la guerra civil española. Está datada en 1938 y en aquella época el artista no ganó ni un centavo con su venta, puesto que el coleccionista Nathan Halpern se la cambió a Pierre Loeb, el marchante de Miró, por un abrigo en 1944. Desde entonces la obra nunca se había mostrado en público, siempre había estado en manos de Halpern, de cuya colección también se vendieron en Christie's 16 obras más, entre ellas Nu couché, pequeño cuadro de Picasso que alcanzó 847.500 dólares. Otro de los lienzos de Picasso, Le mousquetaire a la pipe (1968), tras una ardua batalla acabó en manos de un coleccionista sin identificar por 7.175.000 dólares.
A la espera de Gauguin
En la tarde de ayer, madrugada en España, estaba prevista otra subasta de arte impresionista en Sotheby's en la que se esperaba vender el cuadro de Gauguin Maternidad II por al menos 40 millones de dólares y un retrato firmado por Modigliani por un mínimo de 20 millones.
"El mundo del arte está más unido que los votantes", afirmó a The New York Times el marchante británico James Roundell, al valorar una jornada en la que se vendieron 47 de los 51 lotes que salieron a la venta.
La estrella de la noche fue uno de los 19 cuadros de la serie que Monet dedicó al Parlamento británico, de los cuales sólo cuatro permanecen en manos privadas. Londres, le Parlement, effet de soleil dans le bruillard (1904), propiedad de un coleccionista francés que jamás la había puesto a la venta desde que su familia la compró, a principios del siglo XX, alcanzó 20 millones de dólares (las estimaciones eran de 12 a 18).
El cuadro de Vincent Van Gogh El puente de la tranquilidad (1888) se vendió por algo más de 11 millones de dólares, y el de Paul Cézanne Portrait de femme (alrededor de 1900), por 10 millones. Entre las rarezas de la subasta destaca la venta de Las cuatro estaciones, de Camille Pisarro, por nueve millones de dólares.
Babelia
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