El territorio conocido
Media docenas de guiones escritos al alimón y, sobre todo, el éxito clamoroso de la primera realización dirigida por Agnès Jaoui, Para todos los gustos, le han bastado a ella y a su marido, el talentoso Jean-Pierre Bacri, para convertirse en los grandes innovadores de la comedia francesa. Premiado en Cannes con el galardón al mejor guión, este Como una imagen sirve para reafirmar el singular talento del dúo.
Como una imagen se plantea casi como la otra cara de Para todos los gustos: si allí se trataba de humanizar a un patán (Bacri) que terminaba encandilando al respetable por su sinceridad, aquí se trata de todo lo contrario, de poner en la picota a un personaje con poder en el mundo editorial y con problemas evidentes en el trato con su hija, una acomplejada gordita que posee una garganta de oro y que está dispuesta a abrirse paso con ella en el difícil mundo de la música clásica. Y lo que en el fondo termina proponiendo el filme es una contundente denuncia de la superficialidad que en muchas ocasiones preside nuestras decisiones públicas y privadas, de la facilidad con que dejamos de lado sentimientos complejos para mejor amoldarnos a nuestras necesidades inmediatas, del poder corrosivo de la envidia, los celos, la ambición por llegar a la cumbre. Comedia con mensaje pero sin estridencias, Como una imagen es una segura recomendación para amantes del género, pero sobre todo para cualquier ciudadano sensato e inteligente.
COMO UNA IMAGEN
Dirección: Agnès Jaoui. Intérpretes: Agnès Jaoui, Marilou Berry, Jean-Pierre Bacri, Laurent Grevill, Virginie Desarnauts, Keine Bouhiza. Género: comedia dramática, Francia, 2004. Duración: 110 minutos.
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