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La insurgencia decapita a cuatro militares iraquíes

Hungría retirará a sus 300 soldados antes del 31 de marzo, tras la celebración de las elecciones

Un grupo extremista iraquí ha asesinado a tres agentes de la Guardia Nacional, a quienes acusó de "espiar" para las fuerzas estadounidenses en Irak, según un vídeo difundido ayer por la televisión por satélite qatarí Al Yazira. El grupo, hasta la fecha desconocido, se presentó como las Brigadas de los Honorables de Irak y aseguró que las víctimas habían participado en operaciones militares "en las que habían detenido a combatientes iraquíes".

La grabación muestra a los tres rehenes sentados en el suelo y, tras ellos, a un hombre encapuchado que lee un comunicado, en el que les acusa de "colaborar con las tropas de ocupación". La cadena Al Yazira explicó que el vídeo continuaba con la decapitación de los secuestrados, pero que no difundía las imágenes por respeto a los espectadores.

La organización Yish al Ansar al Sunna (El Ejército de los Seguidores de la Sunna) informó ayer, a través de Internet, del asesinato de un ciudadano iraquí al que identificó como un "oficial de alto rango" de las nuevas Fuerzas de Seguridad de Irak. En su página web, el grupo explica que Husein Shunun fue capturado cuando participaba, junto a soldados de Estados Unidos, en una operación militar en la ciudad septentrional de Mosul. Junto al anuncio, los secuestradores colgaron un vídeo en el que se puede observar cómo uno de ellos, enmascarado, saca un cuchillo y degüella al rehén, tras lo cual muestra la cabeza inerte a la cámara.

Por otra parte, el primer ministro de Hungría, el socialdemócrata Ferenc Gyurcsany, anunció ayer que retirará sus 300 soldados estacionados en Irak antes del próximo 31 de marzo. "Es nuestra obligación quedarnos allí hasta que se celebren elecciones [previstas para finales de enero]

"; sin embargo, una misión más larga resulta imposible", dijo Gyurcsany.

Las tropas húngaras en Irak desarrollan desde septiembre de 2003 labores logísticas y no de combate, a pesar de lo cual el Gobierno de Budapest ha tenido que lidiar con una creciente presión social para que retire a sus soldados. Los 300 militares húngaros están estacionados en Hilla, localidad situada a unos sesenta kilómetros al sur de Bagdad. Un soldado húngaro murió el 17 de junio víctima de una bomba que estalló cerca de un convoy de camiones cisterna, en las cercanías de Bagdad.

Amenaza a la rehén británica

Por otra parte, la organización humanitaria Care International expresó ayer su "profunda conmoción" por el último vídeo de su directora en Irak, Margaret Hassan, secuestrada en el país árabe el pasado 19 de octubre.

En un comunicado, Care pidió a quienes tienen retenida a Hassan, de nacionalidad británica e iraquí, que la pongan en libertad sin causarle daño, después de que la cadena Al Yazira recibiera una cinta con su imagen. La cadena, no obstante, decidió no difundirla por razones humanitarias.

En el vídeo recibido por Al Yazira, el grupo que retiene a Hassan, que no se ha identificado, amenaza con entregarla a Abu Musab al Zaraqui si las fuerzas británicas no se retiran de Irak en 48 horas. Al Zaraqui es el líder del grupo Monoteísmo y Guerra Santa que mató el pasado octubre al rehén británico Ken Bigley.

Entretanto, ayer continuaron los atentados de la insurgencia contra la infraestructura industrial de Irak. Un ataque lanzado contra un oleoducto causó un gran incendio en una zona cercana a Bagaz, a unos sesenta kilómetros al sur de Kirkuk, la capital petrolera del norte de Irak. También fue asesinado ayer un alto responsable iraquí del Ministerio del Petróleo. Husein Ali al Fattal fue tiroteado cuando salía de su domicilio de Bagdad a primera hora de la mañana.

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