La 'batasunización' de la Universidad catalana
Desde hace unos años asistimos, con una sospechosa inoperancia, a la dictadura de unos grupos organizados de estudiantes, los cuales mediante coacción, amenazas y otros medios violentos, deciden quién puede y quién no dar conferencias en el foro de libertad de expresión que deben ser las universidades catalanas.
Tras 25 años de democracia, los comportamientos fascistas reaparecen periódicamente, pero cuando llegan a ser habituales, y son promovidos por grupos que todos conocemos, y a los que nadie se atreve a denunciar, la Universidad pierde muchas de sus principales virtudes. Recientemente, un grupo de salvapatrias encapuchados han agredido a un conocido profesor de Filosofía de la Universitat de Barcelona en su propio lugar de trabajo, de manera que el rectorado ha permitido que este profesor vaya con el escolta que él mismo solicitó.
¿Llegaremos a la situación del País Vasco, donde la mayoría de profesores no nacionalistas que aún no se han exiliado tienen que trabajar escoltados?
¿No es más sencillo, y sobre todo más ético, desenmascarar y encarcelar a esos nuevos Guerrilleros de Cristo Rey? ¿O es que hay algún interés que desconocemos, por parte de las autoridades académicas, en dejar que el miedo sustituya a la libertad?
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.