Asesinado a tiros el vicegobernador de Bagdad en otra jornada violenta

Varios pistoleros asesinaron ayer al vicegobernador de Bagdad, Hatem Kamal Karim, cuando se desplazaba en su coche por el sur de la capital, en una jornada en la que murieron una treintena de personas en varios atentados de los insurgentes y ataques de los soldados de EE UU en el triángulo suní. También prosiguen los secuestros. Un ciudadano estadounidense, otro nepalí y dos iraquíes fueron hechos rehenes a punta de pistola en Bagdad.

Un grupo de pistoleros asesinó al vicegobernador de Bagdad e hirió a cuatro de sus guardaespaldas, según informaron fuentes policiales. La víctima mortal, Hatem Kamal Karim, fue alcanzado por los disparos de los atacantes cuando se desplazaba en su vehículo por el barrio industrial de Al Dura, en el sur de la ciudad. El pasado verano, una oleada de atentados similares acabó con la vida de varios políticos, intelectuales, médicos e ingenieros a los que los insurgentes acusan de "colaboracionistas" con el Gobierno interino encabezado por Ayad Alaui y las tropas extranjeras. El grupo integrista Ansar al Sunna reivindicó el atentado en una página web de Internet.

Los insurgentes también continuaron ayer sus ataques en los principales bastiones de la resistencia en el triángulo suní, la zona comprendida entre Bagdad, Ramadi (100 kilómetros al oeste de la capital) y Tikrit, 170 kilómetros al norte. En la noche del domingo, los insurgentes lanzaron dos cohetes contra un hotel de Tikrit, patria chica del ex dictador Sadam Husein, y mataron a 17 personas. La policía confirmó que la mayoría de las víctimas eran trabajadores que esperaban conseguir un empleo al servicio de las fuerzas de Estados Unidos. Una mezquita cercana al hotel y próxima a un cuartel de las fuerzas norteamericanas resultó dañada.

En Faluya y Ramadi los combates se endurecen día a día, según se aproximan las elecciones, previstas en principio para el mes de enero. En Ramadi murieron al menos seis iraquíes en combates contra soldados estadounidenses que se desataron a primera hora de la mañana, según mandos policiales. También pereció en esta ciudad el domingo, según informó un portavoz de los marines, un soldado norteamericano y otros cuatro resultaron heridos en los enfrentamientos. El portavoz no ofreció más detalles. El pasado viernes murieron en los alrededores de esta localidad, capital de la provincia de Al Anbar, ocho uniformados norteamericanos en el peor ataque sufrido por las fuerzas de EE UU en los últimos seis meses.

También falleció en Ramadi Dhia Najim, un cámara independiente que trabajaba para Reuters y que fue alcanzado por un balazo cuando grababa a las puertas de su casa. Con su muerte son ya 24 los periodistas muertos en Irak en lo que va de año.

En Baquba, 70 kilómetros al norte de Bagdad, un ex teniente coronel de la Guardia Republicana de Sadam Husein fue asesinado a tiros, en una refriega en la que falleció también un estudiante. En la morgue de esta ciudad, un funcionario informó de que había recibió el cuerpo de un contratista empleado por las fuerzas estadounidenses.

Los insurgentes también atacaron ayer por la mañana con cohetes de fabricación casera la base británica de Camp Dogwood, a escasas decenas de kilómetros al sur de Bagdad, donde 850 militares del Reino Unido se han desplegado para permitir que los soldados norteamericanos puedan dedicar todos sus esfuerzos al cerco de Faluya y Ramadi.

Precisamente, en el contingente británico se produjo el pasado fin de semana la primera baja de una mujer soldado. Denise Rose, de 34 años y miembro de la unidad de investigaciones de la Policía Militar, fue hallada muerta el domingo con una herida de bala en una base de la sureña ciudad de Basora. "Se está investigando, pero no se cree que sea resultado de una acción hostil", aseguró el Ministerio de Defensa del Reino Unido en un comunicado divulgado en Londres. Son ya 70 los uniformados británicos muertos en Irak desde que comenzó la invasión del país en marzo de 2003.

Y continúan también los secuestros de ciudadanos extranjeros. El Ministerio del Interior confirmó que un estadounidense, un nepalí y dos iraquíes fueron hechos rehenes cuando un grupo de hombres armados irrumpió por la tarde en las oficinas de una empresa saudí, en el lujoso distrito bagdadí de Al Mansur. Antes del rapto se desató un tiroteo en el que murió uno de los asaltantes.