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Dos coches bomba matan a nueve personas en Bagdad

Un comandante de la Guardia Nacional iraquí sale ileso de un intento de asesinato en Mosul

Aviones de combate de EE UU prosiguen hoy con sus operaciones de castigo sobre las ciudades rebeldes iraquíes de Faluya y Ramadi, mientras Bagdad se ha vuelto a despertar bajo el estruendo de dos coches bomba, cuya explosión ha causado nueve muertos.

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Un vehículo aparcado en los aledaños del Ministerio de Educación, en el céntrico barrio de Adhamiya, ha explotado esta mañana segando la vida de al menos cinco civiles, han informado fuentes médicas. "Cuatro cadáveres, uno de ellos de mujer, llegaron procedentes del lugar del atentado, y hubo que atender a una decena de heridos, uno de los cuales está muy grave", ha explicado a Efe Mustafa Hatem, miembro del plantel médico del hospital Ammán, en Adhamiya. "Un quinto fue ingresado en el depósito de cadáveres del centro médico vecino, donde se atendió a otra decena de personas", ha agregado el facultativo.

La potencia de la explosión derribó gran parte de la estructura del edificio, y causó importantes daños materiales en un colegio, pero sin causar víctimas ni entre los escolares ni entre los funcionarios. "La gente apenas había llegado a trabajar por el Ramadán. Los muertos son porteros, guardias de seguridad y civiles que pasaban por la zona", ha relatado a Efe una fuente del Ministerio de Interior.

Casi al mismo tiempo en que se producía el atentado en Adhamiya, se conocía la noticia de un segundo ataque con coche bomba en el barrio de Abu Ghraib, a medio camino entre la capital y la conflictiva ciudad de Faluya, que ha dejado sin vida a cuatro personas.

Según el relato de los testigos, el vehículo explotó en los aledaños de un cuartel de la Guardia Nacional iraquí vecino a la cárcel de Abu Ghraib, conocida por haber sido escenario de torturas durante la dictadura y también durante la ocupación de EE UU. Entre las víctimas del atentado se encuentran familiares de los prisioneros iraquíes, han indicado fuentes médicas del hospital de esta barriada.

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Asesinato frustrado

Un comandante de la Guardia Nacional iraquí en la ciudad septentrional de Mosul ha escapado hoy ileso a un intento de asesinato en el que resultaron heridos de gravedad varios de sus guardaespaldas, han informado fuentes policiales.

El comandante Fleih Rashid se dirigía a una rueda de prensa cuando un artefacto de fabricación artesanal estalló al paso de su vehículo, explicaron las fuentes. Grupos de hombres armados suelen atacar en Irak a miembros de las nuevas fuerzas de seguridad, funcionarios, médicos, periodistas, comerciantes y otros profesionales a los que tildan de "colaboracionistas" con las tropas extranjeras y con el Gobierno interno iraquí, al que no reconocen.

Ofensiva sobre Faluya

Mientras, en Faluya, al menos seis personas han resultado heridas en una nueva serie de bombardeos nocturnos y matutinos sobre la ciudad, asediada desde hace días por miles de soldados estadounidenses.

Tras los bombardeos del amanecer, soldados norteamericanos se han enzarzado en intensos combates con varios grupos de hombres armados en las carreteras de acceso a la ciudad, han explicado testigos citados por cadenas de televisión árabes.

Fuentes médicas en Faluya han asegurado no tener constancia del número exacto de víctimas que podrían haber causado los ataques, ya que el asedio y los francotiradores apostados en los tejados impiden el movimiento libre de las ambulancias por la ciudad. Además, los insurgentes ya no se desplazan a los hospitales para entregar a los muertos y heridos por miedo a ser asesinados o capturados por los soldados.

En la vecina y también cercada Ramadi, al menos una decena de personas han perdido la vida en los enfrentamientos de las últimas 24 horas, han informado fuentes médicas.

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