París y Berlín tratan de suavizar el Pacto de Estabilidad

Francia y Alemania coinciden en la necesidad de suavizar las exigencias del Pacto de Estabilidad y Crecimiento europeo cuando se concreta que los dos países incumplirán por tercer año consecutivo la exigencia de mantener el déficit público por debajo del límite del 3% del producto interior bruto (PIB). Así lo manifestaron ayer en Berlín el presidente de Francia, Jacques Chirac, y el canciller federal alemán, Gerhard Schröder, tras la cuarta reunión de los Gabinetes de los dos países empeñados en impulsar un eje central en la UE. Al mismo tiempo, el ministro de Economía alemán, Wolfgang Clement, y su colega francés, Nicolas Sarkozy, lograron un acercamiento en la política industrial de Berlín y París tras los enfrentamientos y malentendidos de los últimos meses.

Chirac y Schröder se pronunciaron ayer a favor de un cambio en los criterios para definir el déficit público. El canciller alemán se mostró dispuesto a participar en el proceso de reforma iniciado por la Comisión Europea y declaró: "Queremos seguir un camino practicable". Insistió Schröder en un argumento que repite una y otra vez desde hace meses, y es que el pacto es "de estabilidad y de desarrollo", y que no quiere "que esa segunda parte se escriba con una letra tan pequeña como desean algunos dogmáticos". Para una nueva definición habrá que conseguir el acuerdo de los 25 socios de la UE, dijo Schröder, e insistió en la necesidad de acentuar el aspecto del desarrollo. "Queremos lograr en Europa un desarrollo sostenible, y hay distintos elementos para una razonable interpretación del pacto". Chirac, al lado del canciller alemán, corroboró sus palabras.

Por su parte, los ministros de Economía francés y alemán, Nicolas Sarkozy y Wolfgang Clement, respectivamente, iniciaron su jornada al trote a las 6.30 de la mañana en Berlín. Se mostraron dispuestos a colaborar en política industrial de la forma "más estrecha posible" y acordaron un plan de cinco puntos, que prevé, entre otras cosas, la creación de un grupo de trabajo que lleva el sugestivo nombre de Cooperación Económica y que tiene previsto reunirse a mediados de noviembre en Berlín.