Tres presos condenados junto a Lamari, aislados tras la operación policial

Diez presos supuestamente vinculados con la célula islamista desarticulada el lunes han sido aislados en diferentes cárceles españolas, entre ellas tres condenados junto a Allekema Lamari, el séptimo suicida de Leganés, por su vinculación al Grupo Islámico Armado (GIA). Se trata de Bachir Belhaken, recluido en Villabona (Asturias), Abdelkrim Bensamail (en Córdoba) y Mohamed Amine (Puerto de Santamaría, Cádiz).

También ha sido incomunicado en su celda del penal del Acebuche (Almería) el mauritano Kamara Bidhaima Diadie, presunto contacto para la adquisición del explosivo para volar la Audiencia Nacional de Baldomero Lara (preso en A Lama, Pontevedra). Los investigadores dicen de este último que es un traficante de armas de etnia gitana que le habría informado de que tenía acceso a dinamita de la minas de mármol de Almería. En A Lama estuvo preso Lamari hasta que fue puesto en libertad por un galimatías judicial.

El ministro del Interior, José Antonio Alonso, afirmó ayer que los "presos musulmanes por delitos terroristas" están "perfectamente controlados" en las cárceles españolas y puso como prueba la célula desarticulada anteayer en varias provincias, informa Luis Barbero. Alonso, que ayer mantuvo una reunión en Faro (Portugal) con su homólogo portugués, Daniel Viegas Sanches, destacó que se trata de una operación "preventiva" contra el radicalismo islamista. "Es una operación contra el integrismo islamista, contra actividades potencialmente terroristas. Es una labor preventiva para evitar acciones. La policía y el juez han cortado de raíz el problema", dijo Alonso.