'Masters' muy especializados

Ya no es suficiente con tener un master de gestión, hay que ponerle un apellido. Por ejemplo, gestión inmobiliaria o de empresas turísticas. Y tampoco vale con tener un master en derecho, hay que acotar el área en la que uno se especializa: derecho marítimo, por ejemplo. En los últimos años la oferta de este cursos se ha multiplicado al mismo tiempo que aparecían master casi para cada gusto.

Desde el año 1995 se ha multiplicado por tres el número de cursos que se imparten en España. A finales de 2003 había 2.150 diferentes

Con la formación de tercer ciclo ha pasado en los últimos años algo parecido a lo que ocurrió con los canales de televisión. Su número se ha disparado y ha aumentado la variedad. Si antiguamente el master en Administración de Empresas (MBA) era el master de los masters, ahora ha cambiado el panorama. Éste sigue siendo el programa dominante -cuando las empresas piden un formación de posgrado a sus candidatos, el 55% de ellas especifica que se trate de un MBA-, pero actualmente "la variabilidad es la nota dominante en el tipo de programa requerido. De hecho, es posible identificar áreas con un algo grado de especialización patente en su baja valoración de programas MBA generalistas", señala el Informe Infoempleo 2004, que analiza la oferta de empleo cualificado.

Master en musicoterapia, en medicina subacuática, en dirección, gestión y asesoramiento jurídico deportivo, por poner sólo algunos ejemplos, son los nuevos programas que ofrecen las universidades española, donde se ha disparado la oferta de cursos de posgrado. Desde 1995 se ha multiplicado por tres el número de programas master que se imparten en España y a finales de 2003 se ofrecían 2.150 programas de posgrado (con más de 400 horas), según el mismo informe.

"La formación más genérica pierde interés, un master en contabilidad o en recursos humanos tiene demanda, pero hay mucha competencia, así que se busca más especialización, no algo como un master de gestión, sino un master de gestión en empresas turísticas", explica Nanda Requena, gestora de Formación de Posgrado de la Universitat de València. En este centro universitario se imparten este año 238 cursos de posgrado (no todos son masters). Y cada año ofrecen entre 10 y 15 nuevos programas de masters.

"Los cursos muy específicos, que van a un campo concreto, están teniendo mucha demanda", explica Requena, quien subraya que "las empresas tienen cada vez más claro lo que quieren y que tienes que tener un perfil más definido". Un ejemplo de ello es el Master de Derecho Marítimo que finaliza su primera edición por estas fechas. "Había mucha gente interesada en este área y no había oferta de formación en el campo jurídico", dice Carlos Salinas, profesor de derecho de la Universidad de Valencia y director del programa.

Jóvenes y especialistas

En este tipo de programas participan "básicamente dos perfiles, el joven licenciado que quiere completar su formación y el profesional que está trabajando y quiere especializarse", explica un responsable de la Agencia de Posgrado de la Universitat de Barcelona, que en el pasado curso ofreció 477 programas de posgrado. "Un tercer perfil", continua, "es el del licenciado generalista que monta una empresa y necesita formación complementaria".

Raquel P. Fariñas, profesora de educación plástica, se ajusta a la descripción. Hace cuatro años cursó la primera edición de un Máster en Arte Terapia en la Universidad Complutense. Cuando terminas la carrera "te tienes que mover en el mundo real y necesitas formación para eso", dice. Aunque en su caso no fue sólo una cuestión profesional: "sabía que mi arte era una vía terapéutica, tenía la sensación de que si era bueno para mí sería bueno para otros", explica.

Alumna avanzada de un campo novedoso ha terminado dando clases en el programa y abriendo su propio taller de arte terapia. Y pese a ser un área tan novedosa alumnos no faltan: "tenemos una demanda impresionante, el triple de solicitudes de las plazas que hay", dice María Ángeles López, directora del programa.

Incluso en áreas donde los masters no son habituales, como la informática, comienzan a surgir algunos cursos especializados. La Facultad de Informática de la Universidad Complutense de Madrid abre este año la primera edición de su Master en Desarrollo de Videojuegos.

Su director, Pedro González Calero, vicedecano de la facultad, reconoce que no está claro que haya demanda de profesionales con esta formación en España, si bien sí que la hay en el extranjero. González Calero cree que el interés entre los alumnos no falta y el master es una forma de ofrecer una formación complementaria. Además, el programa cuenta con la participación de la principal empresa española de videojuegos, Pyro Studios, que ofrecerá algunas prácticas de trabajo a los alumnos.

Y es que la enjundia de una formación de este tipo no se cuece sólo en las aulas. "No sólo se trata de formación, sino de una plataforma para hacer contactos" que luego puedan servir en el mundo laboral, y esto parece esencial en una actividad como la marítima que por constitución "es un sector muy cerrado", explica Carlos Salinas, de la Universidad de València.