El Programa IDEAS de la Politécnica lidera la creación de empresas de base tecnológica

Detrás de cada empresa, "hay muchas batallas en las que combatir y muchos muros por derribar", cuenta Juan Antonio Galindo, un joven informático de 34 años que en 1995, aun siendo estudiante de la Politécnica de Valencia, empezó a involucrarse en proyectos de investigación en microelectrónica, lo que le valió el reconocimiento de varios premios, llevándolo -más allá del diploma- a un giro en su destino profesional. En vez de colocarse en una empresa, con el dinero de los premios Galindo optó por invertir, junto a otros cuatro amigos, sus primeros 6.000 euros de entonces para crear en 1997 el embrión de lo que en la actualidad es Factory Web. Una empresa de servicios integrales de Internet para corporaciones que -con la insoslayable "química" de su actual socio Miguel Aucejo- se ha convertido hoy en un referente en el mercado nacional del sector

Un 12% se dedica al sector del Mueble y Diseño; y otro 27% al de Nuevas Tecnologías

"FactoryWeb no estaría donde está, sino fuera por Ideas", afirma Aucejo

con delegaciones en 11 provincias (especializadas en el desarrollo de aplicaciones y software de comercio electrónico, marketing onl-line y gestión y mantenimiento de dominos).

Al más puro estilo de "las Silicon Valley", y al abrigo del Programa Ideas puesto en marcha en 1992 para asesorar y promover empresas de base tecnológica,un centenar largo de estudiantes de la Politécnica de Valencia -como Galindo y Aucejo- llevan una década de experiencia en el difícil terreno de la búsqueda de "otras salidas laborales", menos conservadoras que la condición de convertirse en asalariados.

Éste es también el caso, más conocido, de tres colegas universitarios, Juan Luis Aguilera, Iñaki Miralles y Antonio Piñera Lucas, que un día (hace ya diez años) se juntaron en la cafetería de la escuela de telecos en busca de "ideas" para hacer realidad su sueño: aplicar la ingeniería técnica en Telecomunicaciones a la especializada área, pero poco comercializada entonces, de la contaminación acústica -hoy tan en boga- con el objetivo de ser pioneros e innovar en el terreno de la mejora de la calidad de vida y del Medio Ambiente. Sin dinero, pero con muchas ganas, en 1997 -en la habitación de un piso de estudiantes en Gandia- compatibilizando clases trabajos de los más variado, sin pegar casi ojo y reinvirtiendo todo lo que ganaban (y lo que no también) para no caer en la tentación de tirar la toalla en los peores momentos, nació Acusttel.

Nunca se bajaron del tren. La empresa de acústica y telecomunicación Acusttel es hoy la primera firma del sector de la Comunidad, con delegación en Murcia y posicionada en el ranking nacional de acreditación de calidad como la sexta firma con el certificado ENAC (compatible en la UE.

La realidad no ha sido, sin embargo, un camino de rosas, reconocen éstos y otros emprendedores universitarios que, gracias a Ideas, han hecho de sus personales obstinaciones una prolija red de empresas valencianas innovadoras que se abren paso en un mercado cada vez más competitivo. mercado. "Factory Web", ha reconocido, por ejemplo, Miguel Aucejo, "no estaría donde está si no fuera por Ideas. El programa se ha convertido en un cuño, un sello de calidad que reconocemos en todos nuestros portafolios, como muestra de apoyo y agradecimiento".

Desde la puesta en marcha del Programa Ideas, la Politécnica ha contribuído a la creación de 173 empresas de base tecnológica -de las que 140 siguen activas-, impulsando a la vez la regeneración de sectores diversificados: un 12% de las empresas Ideas pertenecen al sector del Mueble, Diseño y Decoración; el 27% al de Informática y Nuevas Tecnologías; y otro 30% al sector de servicios a empresas y particulares. Más compleja es la entrada en el sector de Medicina y Salud, donde ya hay un 5% de empresas Ideas en el mercado, mientras otro 9% avanza en el sector de la producción industrial y maquinaria. El resultado, resume el director del programa, José Luis Alonso, confirma que "con el apoyo de toda la universidad, profesores e investigadores, la creación de empresas de base tecnológica es una realidad tangible".