Afectados de Ardystil esperan el fallo del Supremo para disponer de la indemnización
El Consell paga 1,5 millones de euros pero sin especificar la cantidad a cada ex operario
La alegría con la que los afectados por el síndrome Ardystil acogieron en julio de 2003 el fallo de la Audiencia de Alicante por la muerte de seis empleados de la aerografía textil y la enfermedad de otras 69 a principios de los noventa, decrece. El tribunal condenó a un inspector de Trabajo y a seis aerografías a indemnizar a los afectados con 4, 9 millones de euros. La Generalitat ya ha aportado su parte -1,5 millones- pero sin especificar la cantidad a cada uno de los ex operarios. Éstos no podrán disfrutar del dinero hasta que el Tribunal Supremo resuelva los recursos.
El recurso que presentaron las acusaciones particulares ante el Tribunal Supremo abrió una puerta a la esperanza entre el colectivo a fin de poder ver incrementadas las indemnizaciones que estableció el tribunal de la Sección Tercera de la Audiencia de Alicante.
La Generalitat Valenciana, responsable civil subsidiaria del inspector de Trabajo, asumió el pago de sus indemnizaciones y ha autorizado estos días el ingreso de 1.561.677'22 euros en la cuenta del juzgado de Alcoi. Esta cantidad no cubre la suma total de las indemnizaciones por lo que la Audiencia de Alicante notificó a la Generalitat Valenciana a través de una providencia que indicara las cantidades que debería percibir cada perjudicado. El pago de una parte de las indemnizaciones ha vuelto a mermar la perspectiva de cobro de los afectados.
Amparo Pascual, presidenta de la Comisión de afectados reconoció que aunque sabían que no podrían disponer de las cantidades de las indemnizaciones hasta que el Tribunal Supremo ofrezca una sentencia firme, esperaban que el pago se hubiera realizado integro "y no por cuenta gotas". "Pensábamos que al autorizar la ejecución provisional de la sentencia, las cosas iban a ir mejor, pero hemos comprobado que todo sigue igual de lento", lamentó la portavoz del colectivo de ex operarios. La portavoz del grupo de trabajadores, que enfermaron por inhalación de productos químicos, no pierde la fe en que el Consell autorice el ingreso del resto antes de que finalice el año. "Preferimos esperar a que se pague la cantidad integra tal y como ordenó la presidenta del tribunal que juzgo el caso Ardystil para proceder al reparto", explicó Pascual.
Esta indemnización es virtual ya que los afectados no podrán gastarse el dinero aunque si invertirlo, según explicó la portavoz. "Hasta que haya una sentencia firme pueden pasar años. Si el dinero es nuestro preferimos que esté en nuestras manos que nos aporte algún interés bancario y no siga en las cuentas de la Generalitat".
Créditos bancarios
La representante avanzó que no consentiría que ningún culpable dejara de pagar porque aseguró "son muchos los afectados, que después contraer la fibrosis pulmonar han tenido que recurrir a créditos bancarios" para hacer frente al pago de los abogados y así demostrar que han estado y siguen enfermos. "Hay una persona que está esperando cobrar para pagar una operación de reducción de estómago", añadió. Se trata de una joven que aumentó cerca de cien kilos su peso como consecuencia de la medicación.
Para Amparo Pascual el síndrome Ardystil "ha desgraciado la vida a muchos jóvenes". Lo dijo en relación a los afectados que han desarrollado otras dolencias físicas y neurológicas. Por esta razón reclamaron a la Consellería de Sanidad que iniciara una serie de revisiones médicas que concluyeran en un estudio epidemiológico y así poder demostrar el desarrollo de secuelas como tumores o la pérdida de memoria. "La Consejería de Sanidad ha incumplido totalmente su compromiso de poner en nuestras manos un equipo de médicos en Valencia Alcoi y Alicante para llevar a cabo las revisiones y conocer el estado de salud cada afectado". Pascual explicó que su interés es saber qué probabilidades tienen los afectados de desarrollar tumores como los que han padecido ya cuatro personas, una de las cuales falleció. "Sólo se nos ha colocado en una lista de espera", aseguró.
El colectivo sigue sin saber cuándo empezarán las pruebas médicas que se han visto retrasada por la falta de presión del colectivo. "No puedo estar todos los días en los medios de comunicación denunciando los incumplimientos de este tipo de cosas para que se lleven a cabo", criticó Pascual. Confió en que la película que sobre el síndrome Ardystil ha dirigido Sigfrid Monleón sirva para despertar conciencias sobre el mal que ha provocado el síndrome Ardystil en un centenar de familiares de trabajadores de L' Alcoià y El Comtat que desde 1992 siguen esperando justicia.
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