300 piezas repasan la construcción histórica de la Monarquía española
La exposición Los Reyes Católicos y la Monarquía en España, inaugurada ayer en el Museo del Siglo XIX de Valencia, repasa el complejo proceso que desembocó en la unión de los dos principales reinos hispánicos a través de la política, el arte, el comercio, la guerra y la religión.
La muestra, que forma parte de los actos que la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales dedica al quinto aniversario de la muerte de Isabel la Católica, reúne cerca de 300 piezas originales, cedidas por un centenar de coleccionistas privados, fundaciones y museos españoles y extranjeros como el Kunthistorishes Museum de Viena, el Berlin State Museum, la Biblioteca Nazionale de Florencia y los Museos Vaticanos.
Organizada en siete apartados, la exposición, cuyo comisario es Alberto Bartolomé Arraiza, arranca con los orígenes de la Monarquía, capítulo centrado en la unificación de las dos ramas de la familia Trastamara, encarnadas por Isabel de Castilla y Fernando de Aragón.
El fortalecimiento de las bases del poder real y la concesión del título de Reyes Católicos otorgado por el papa Alejandro VI, en 1494, ocupa la segunda parte, que se adentra después en las relaciones entre los monarcas y la nobleza. Un pulso marcado por la voluntad de los soberanos de excluir a la alta nobleza del control del Gobierno y de acabar con sus regulares enfrentamientos, a cambio de que colaboraran en la expansión de la Monarquía y de consolidar sus privilegios sociales y económicos.
Castilla y la Corona de Aragón presentaban, a finales del siglo XV, una diversidad religiosa que chocaba con el deseo de unificación de los Reyes Católicos. Una colección de retratos de jerarcas católicos y numerosos objetos litúrgicos, que van desde relicarios a páginas de la Cábala, componen este apartado dedicado a la fe en el que se aborda el proceso que acabó con la expulsión de judíos y musulmanes de la Península.
La expansión económica producida por la extensión de las rutas marítimas del Atlántico y el Mediterráneo centra la quinta sección de la muestra, seguida por Las letras y las armas, donde puede verse el ajuar completo de Boabdil junto a ediciones antiguas del Tirant lo Blanch, Joanot Martorell o de la Tragicomedia de Calisto y Melibea, escrita por Fernando de Rojas.
El repaso se cierra con La renovación del gusto, que repasa la introducción de las escuelas pictóricas flamenca e italiana en España por medio de las figuras de Juan de Flandes, que se asentó en Castilla, y de Paolo de San Leocadio, que se estableció en Valencia.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.