_
_
_
_
Editorial:
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

Negras perspectivas

¿Quién iba a decir que el actual caos de violencia en Irak sería presentado por alguna autoridad responsable casi como el mejor de los escenarios? Y sin embargo, así lo ha hecho en su prognosis realizada antes del verano el mal llamado Consejo Nacional de Inteligencia de EE UU, que estima que la situación no mejorará al menos hasta finales de 2005, y fija como escenario más negro, pero perfectamente posible, la caída de Irak en una guerra civil. En vez de mejorar, la seguridad del país se deteriora a ojos vista.

Así que no es de sorprender que el habitualmente cauto secretario general de la ONU, Kofi Annan, haya considerado "improbable" que en estas condiciones se puedan celebrar unas elecciones "creíbles" en la fecha prevista de enero próximo. El secuestro ayer de dos contratistas americanos y un británico en el barrio rico de Bagdad, tras los casos de dos cooperantes italianas y dos periodistas franceses entre un centenar de otros secuestrados, los constantes atentados y la guerra de intensidad variable lo vienen a confirmar y a hacer el país mesopotámico no sólo ingobernable, sino también de imposible reconstrucción. Los mandos militares de EE UU están alertando a los contratistas civiles que ni siquiera pueden garantizar la llamada Zona Verde de Bagdad, los cuarteles generales estadounidenses, británicos y del Gobierno provisional iraquí.

Más información
Dos estadounidenses y un británico, secuestrados en Bagdad
Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Es en extremo preocupante la visible ausencia de estrategia para salir de este avispero por parte de la Administración de Bush. No sólo se lanzó a una guerra que ahora Kofi Annan declara sin tapujos "ilegal", sino que nadie parece tener idea sobre lo que se pueda hacer. En Irak se están librando ahora varias guerras: contra el ocupante estadounidense y sus colaboradores, por parte de diversos grupos chiíes, suníes y otros vinculados a Al Qaeda, en una nación que se ha convertido en la nueva escuela de terrorismo y resistencia; y entre los propios iraquíes, chiíes contra suníes, sin olvidar a los kurdos, acusados de desplazar poblaciones turcomanas y árabes para asegurarse su territorio, lo que prefigura una posible y desestabilizadora desmembración del país.

El calendario no ayuda. De aquí a las elecciones presidenciales del 2 de noviembre en EE UU cabe temer que redoble la violencia de los insurgentes y terroristas. Y después, gane o pierda Bush, pueden surgir tentaciones de usar con mayor crudeza aún la fuerza militar antes de la toma de posesión del nuevo presidente estadounidense en enero y de las improbables elecciones iraquíes a finales de ese mes. Si Bush ha creado este enorme lío, no hay que contar con que sepa salir de él. No es de extrañar, pues, que una mayoría del 53% frente al 45% de los ciudadanos de EE UU considere que "no merece ser reelegido". Una mayoría aún mayor en el resto del mundo también lo piensa, pero no vota en esas elecciones.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_