Una protesta empaña el inicio de las fiestas de Sants
Tuvieron cintura. Los tres integrantes de la compañía cómica Teatro de la Guerrilla eran los encargados de leer ayer el pregón de la fiesta mayor de Sants -que se iniciará mañana y se prolongará hasta el día 28- desde el balcón de la sede del distrito barcelonés, en el parque de la España Industrial. No pudieron hacerlo porque se lo impidieron los abucheos y bocinazos de un grupo de okupas, que se manifestaron frente al distrito y leyeron un escrito para pedir el final de los desalojos policiales de las casas ocupadas.
Sin embargo, los pregoneros no se amedrentaron. Como no les dejaban hablar, bajaron para dialogar con los manifestantes, que fueron increpados por los vecinos del barrio. "Hemos venido a oír el pregón y por vuestra culpa nos hemos quedado sin escucharlo. La libertad de expresión es para todos", se quejó un asistente a los que protestaban. Se vivió algún momento tenso -una mujer mayor se lió a bolsazos con los okupas al grito de "muertos de hambre"-, pero al final las cosas no fueron a mayores.
"No es una manera democrática de comportarse. Siempre les hemos dejado leer sus manifiestos. Trataremos de retransmitir el pregón por la televisón local", afirmó la concejal del distrito, Imma Moraleda. "Ha sido un placer venir aquí. Que tengáis unas buenas fiestas mayores", desearon los integrantes de la compañía catalana a los vecinos.
Aunque los actores trataron de hablar con los okupas, éstos hacían oídos sordos. "No tenéis nada que decirme con las cámaras delante. Eso es propaganda", les dijo uno de ellos. "Como van con traje, les habrán confundido con políticos", concluyó un asistente.

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