Saura afirma que si CiU bloquea el Estatut lo pagará electoralmente

El consejero de Relaciones Institucionales, Joan Saura, advirtió ayer de que "si alguien bloquea artificialmente la reforma del Estatut, lo pagará electoralmente". En una clara alusión a CiU, Saura se mostró convencido de que la federación no dispondrá de argumentos para oponerse a la reforma. "El texto que plantearemos es muy ambicioso políticamente", afirmó el consejero. Si, pese a ello, "lo bloquea de forma no justificada" alegando la voluntad de ir más allá en el proceso de reforma, "tendrá que explicarlo muy bien" pues se enfrentará al riesgo de que las urnas le pasen factura, auguró. "Si alguien no quiere entrar en un texto mayoritario, tendrá que asumir sus responsabilidades", apostilló.

Saura afirmó, sin embargo, que el Gobierno catalán está "en disposición de llegar a un acuerdo con CiU", a la que advirtió: "Nos equivocaríamos si hiciéramos de una palabra o un concepto motivo de bloqueo". Aludió así a la reivindicación de que el Estatut incorpore el concierto económico para Cataluña. Según apuntó, los socios del tripartito están comprometidos por el acuerdo del Tinell a defender un modelo que reporte "resultados similares" al concierto, aunque el sistema adoptado no sea idéntico al vasco. Recordó que también esta fórmula fue recogida por CiU en su propuesta de nuevo Estatut, que "no habla de concierto, sino de resultados similares".

Apoyo ciudadano

Saura salió al paso de las críticas que ha suscitado la campaña de participación lanzada por la Generalitat para recabar aportaciones ciudadanas al proceso de reforma estatutaria. Según afirmó, "no hay ningún argumento que sustente las acusaciones de frivolización". Junto a "los objetivos fundamentales de sensibilización y participación", el consejero destacó también la función "fundamental" de la campaña "de que cuando el texto del Estatut vaya a Madrid, no lo lleven sólo los parlamentarios sino que tenga un gran apoyo social", pues "si hay dificultades con el Gobierno central, no es lo mismo un Estatut hecho a puerta cerrada por 12 personas" que un texto avalado por la sociedad catalana. Saura apuntó asimismo la necesidad de tejer complicidades en el conjunto del Estado. "Algunos piensan que lo que pedimos es insolidario", argumentó. "Necesitamos acabar con la mala imagen que tenemos en algunos sectores del Estado español, que piensan que Cataluña va a la suya", añadió.

El consejero explicó que el Gobierno ya tiene ultimados los puntos básicos de la nueva ordenación territorial, que será presentada en la segunda quincena de septiembre "para abrir"luego un periodo de diálogo de uno o dos meses con la oposición y las entidades con el fin de lograr un consenso importante. Según Saura, hay que "intentar evitar los errores" de las leyes territoriales aprobadas por CiU en 1987, entre los que destacó su falta de consenso político.