El presidente elogia al pueblo español por su actitud el 11-M

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, rindió tributo ayer a los miles de participantes que en las masivas manifestaciones del 12 de marzo, tras el atentado terrorista del 11-M, comenzaron a preguntar por toda España "¿Quién ha sido?". Lo consideró una respuesta obligada ante las posiciones de algunos dirigentes del PP que apuntan de manera creciente que esas manifestaciones condicionaron el resultado electoral y lo llegaron a alterar.

El presidente del Gobierno, en su alocución en El Escorial, y en un tono de emoción contenida, aseguró que "el pueblo español dio la mejor lección en la lucha contra el terrorismo" al "no dejarse llevar por el miedo, no buscar la seguridad en casa y salir a la calle apostando por la libertad y la democracia". "Preguntaron. Querían la verdad. Por eso estuvieron en la calle masivamente. Estaban unidos y mirando e interrogando al poder desde unos valores muy claros y contundentes".

El homenaje al pueblo español, tras el 11-M, era una respuesta a las declaraciones que el dirigente del PP, Jaime Mayor Oreja, había realizado horas antes en el mismo lugar y en el mismo seminario, en las que abogó por que se aplazasen las elecciones tras atentados como el del 11-M porque alteran los resultados electorales.

Rodríguez Zapatero también replicó, de forma aún más directa a Mayor Oreja, pero sin citarlo, que "ninguna práctica democrática debe alterarse por el terrorismo". Zapatero, aunque no lo dijo expresamente, estaba perplejo porque la propuesta del ex ministro del Interior del Gobierno de Aznar de aplazar las elecciones ante los atentados venía a ser una invitación a que los terroristas intervengan en los procesos electorales.

"Luchador"

Junto a Rodríguez Zapatero seguía su intervención muy atentamente el juez Baltasar Garzón, como director del seminario "La lucha contra el terrorismo y sus límites". Y el presidente del Gobierno socialista, al final de su alocución, también le dirigió un elogio al calificarlo como "luchador contra la mayor lacra del siglo XXI". Y mirando al juez Garzón se comprometió a que su Gobierno "será escrupuloso en el cumplimiento de la legalidad a la hora de combatir el terrorismo", en clara referencia a la guerra sucia contra ETA que el juez combatió hace más de una década.

Zapatero se declaró "militante activo" en la defensa de los principios democráticos en la lucha contra el terrorismo. "Ninguna convicción democrática debe cuestionarse porque el terrorismo actúe. El terrorismo es la negación de la democracia y la mejor manera de combatirlo es la afirmación y la práctica democrática continua en todos los ámbitos". La intervención de Rodríguez Zapatero, seguida por numerosos jóvenes universitarios, fue acogida con una fuerte ovación.