El comisario europeo Mario Monti se perfila como nuevo ministro de Economía italiano
La independencia y el prestigio del político concitan el consenso de la coalición gubernamental
Silvio Berlusconi quiere que el comisario europeo de la Competencia, Mario Monti, sea el sustituto de Giulio Tremonti al frente del Ministerio de Economía italiano. Esta decisión apaciguaría la tensión que se vive en el seno del Ejecutivo tras la dimisión de Tremonti, ya que Monti es una figura independiente de la coalición gubernamental La Casa de la Libertad. El presidente de la República, Carlo Azeglio Ciampi, también apoya el nombramiento de Monti, sabiendo que será bien acogido tanto por los empresarios como por Europa y que su prestigio puede reforzar la imagen de la economía italiana.
El primer ministro, Silvio Berlusconi, y Monti, de 61 años, se reunieron ayer por la tarde tras aterrizar éste en Milán proveniente de Bruselas. Su hipotético nombramiento inauguraría una etapa tecnocrática en la gestión del Ministerio de Economía italiano, además de independiente de las fuerzas de la coalición de Gobierno (Forza Italia, Alianza Nacional, Unión de Demócratas Cristianos y Liga Norte).
En este sentido, Marco Follini, el líder de los demócratas cristianos (UDC), ha manifestado que para su partido la alternativa de Monti "sería una victoria al 100%", ya que no está muy de acuerdo sobre la precipitación de la renuncia de Tremonti a sólo dos días de la reunión de ministros de Finanzas de la UE (Ecofin), que se celebra hoy en Bruselas.
Gianfranco Fini, líder de Alianza Nacional (AN), está dispuesto a apoyar el nombramiento de Monti, pero teniendo en cuenta que aún quiere revisar la figura de un superministro en un ministerio tan crucial como el de Economía, y en el que quiere participar. Además, Fini se encuentra de nuevo ante un ministro de Economía que no comparte sus ideas más cercanas a lo social.
Por otro lado, cuando quedan dos años para las próximas elecciones generales, la oposición italiana ha pedido al Ejecutivo italiano que formalice la crisis de Gobierno, e incluso Verdes y Comunistas han hablado de la necesidad de elecciones anticipadas.
Los analistas de la prensa italiana anunciaban ayer el fin de la monarquía berlusconiana de La Casa de la Libertad, tras cinco años de un modelo basado en un fuerte liderazgo, y el inicio de la oligarquía con el equilibrio de fuerzas entre Forza Italia, AN y UDC. El otro partido de la coalición, la Liga Norte, ha expresado su descontento ante el cese de Tremonti y ha pedido a Berlusconi que le vuelva a poner al frente de Economía bajo amenazas de dejar la coalición y provocar una crisis de Gobierno por falta de apoyos parlamentarios.
Berlusconi se presentará hoy en el Ecofin con las mismas maniobras financieras que Tremonti había preparado antes de cesar en su cargo. La maniobra correctiva, por la que Italia pretende reducir el gasto en 5.500 millones de euros, se basa en un recorte de 2.240 millones a los ministerios, 1.430 millones menos de incentivos a empresas y otras medidas, 840 millones a los ayuntamientos y la misma cantidad a empresas públicas como la Ferroviaria o Correos. Además de estos 5.500 millones de euros, Giuseppe Vegas, subsecretario de Economía, anunció ayer que tiene previsto otro recorte administrativo de 2.000 millones de euros para hacer frente a las exigencias del Ecofin. Tanto AN como UDC han mostrado su respaldo a las líneas maestras del ex ministro de Economía que Berlusconi presentará hoy, respaldo concedido "por un sentido de lealtad y de responsabilidad política", según ha afirmado Fini.
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