La izquierda presiona al presidente Sampaio para que anticipe las elecciones legislativas
El perfil populista del alcalde de Lisboa, candidato a sustituir a Barroso, despierta recelos
El primer ministro portugués, José Manuel Durão Barroso, presentará mañana su dimisión ante el presidente de la República, Jorge Sampaio, que durante la próxima semana deberá decidir, según la Constitución, si acepta el candidato elegido por los socialdemócratas en el Gobierno (PSD), el controvertido y populista Pedro Santana Lopes, o si convoca elecciones anticipadas a las previstas para el año 2006. Los sondeos indican que la mayoría de los portugueses quieren que se adelanten los comicios y la oposición en pleno se adhiere a la misma exigencia.
Fuentes presidenciales revelaron a varios diarios lusos que a pesar de que Sampaio fue inicialmente reacio a la convocatoria de elecciones, esta idea empieza a cobrar fuerza en el Palacio de Belém.
La salida de Durão Barroso para presidir la Comisión Europea ha desatado tal tormenta política en el país, que varios líderes políticos la han calificado como "la mayor crisis desde el 25 de abril", en alusión a la Revolución de los Claveles, que en 1974 acabó con la dictadura. El presidente Sampaio, que esta semana aseguró que se enfrenta "a la decisión más dura" de sus dos mandatos, ha recibido estos días a diversos líderes políticos y económicos para buscar una salida. Entre ellos a ex jefes de Estado o de Gobierno como António Guterres, Mário Soares o Anibal Cavaco Silva, además de dirigentes de la patronal y de la banca. Algunos de los consultados, como el presidente de la Asociación Portuguesa de Bancos, João Salgueiro, aseguraron tras la audiencia que habían manifestado al presidente su deseo de que el nuevo primer ministro sea refrendado en las urnas.
El semanario Expresso, citando fuentes de Presidencia, asegura que la hipótesis de las elecciones, prácticamente descartada la semana pasada, alcanza ahora un 50% de posibilidades de llevarse a cabo. El diario Publico afirma que para el socialista Sampaio la razón que más pesa es la duda de que el nuevo Gobierno conservador corresponda con la voluntad de la mayoría del electorado.
La actual coalición de derechas PSD-PP (Partido Popular) se fraguó tras las elecciones legislativas de 2002, y sufrió un batacazo electoral en los comicios europeos del pasado junio frente a los socialistas, que sacaron 11 puntos de ventaja. A esto se suma que el candidato a primer ministro del PDS, el polémico alcalde de Lisboa, Pedro Santana Lopes, no se presentó como candidato en las elecciones y que representaría un giro hacia la derecha respecto a las posiciones más centristas de Barroso.
El Consejo Nacional del PSD eligió el jueves a Santana Lopes para presidir el partido, lo que le convirtió en el candidato oficial de los conservadores para el puesto de primer ministro. La candidatura del alcalde fue impulsada desde el primer momento por Durão Barroso. Enemigos históricos desde los tiempos de la universidad, en los que el hasta hoy jefe de Gobierno militaba en la extrema izquierda y Santana Lopes en un grupo de extrema derecha, ambos líderes han ido acercándose en los últimos años, hasta convertirse en aliados tras derrotar el alcalde a los socialistas en Lisboa, demostrando así su tirón electoral. "Una máquina de ganar elecciones y un animal político", dicen de él tanto sus defensores como sus detractores -algunos en las propias filas del PSD-, quienes, sin embargo, temen que sus políticas populistas, implementadas gracias al derroche de las arcas públicas y desorbitadas campañas de marketing, den al traste con los sacrificios económicos de los dos últimos años.
La izquierda en bloque y los sindicatos piden elecciones anticipadas argumentando, en palabras del vicepresidente del Parlamento y poeta, el socialista Manuel Alegre, que "no es un problema de legitimidad constitucional, sino moral y política. La única legitimidad posible es la del pueblo portugués. No es un problema del candidato, es un problema de procedimiento". Francisco Louça, líder del radical Bloco de Esquerda, un partido creado en 1999, que atrae fundamentalmente al voto joven y que podría ser la próxima alianza de los socialistas ante su rápido crecimiento en caso de elecciones, asegura que de confirmarse Santana Lopes, constituiría "una conspiración política" que abriría una crisis "porque el hecho democrático es lo único que otorga estabilidad". La mayoría de los empresarios defiende a Santana Lopes y consideran que unos comicios anticipados serían un nuevo factor de inestabilidad para el país. Algunos analistas apoyan esta idea porque aseguran que nada garantiza que la situación que salga de las urnas vaya a ser estable, ante una izquierda dividida, que ha tardado en reaccionar y que no ha sido capaz de jugar todas sus bazas ante la fractura de la derecha.
Si finalmente no se convocan elecciones, Sampaio deberá imponer fuertes condiciones al nuevo Gobierno, apunta el director de la revista Visão, Carlos Cáceres Monteiro. "La designación de Santana Lopes sólo sería posible si el presidente impone fuertes condiciones, como la continuidad del programa económico y rechaza al derechista y hasta hace poco antieuropeísta y xenófobo Paolo Portas como ministro de Exteriores, puesto que le tenía reservado Santana Lopes".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.