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El Gobierno andaluz mantendrá la consignación de la deuda histórica en las cuentas de 2005

La Junta sostiene que la negociación debe desarrollarse con todas las comunidades

Lourdes Lucio

El Gobierno andaluz reflejará en el proyecto de ley de Presupuestos de la Junta de Andalucía para 2005 las partidas consignadas en ejercicios anteriores en concepto de la llamada deuda histórica, una vieja reivindicación de todos los partidos políticos nunca resuelta y cuyo debate está sujeto a las ritmos que le quieran imprimir los dos partidos mayoritarios en función de sus respectivas estrategias. El portavoz del Ejecutivo autonómico, Enrique Cervera, afirmó que esta petición "forma parte de la reivindicación" del gabinete que preside el socialista Manuel Chaves.

Cervera, en conferencia de prensa tras la reunión del Consejo de Gobierno, no quiso "adelantar" si la deuda histórica figurará en el proyecto de ley de Presupuestos de la Junta para el próximo año -como ha ocurrido durante los mandatos estatales del PP- pero de sus palabras quedó claro que esta petición se mantiene intacta tras la llegada del socialista José Luis Rodríguez Zapatero a La Moncloa. Fuentes del Gobierno andaluz indicaron que sería "poco razonable" que estas partidas no se incluyan en el proyecto de las cuentas autonómicas.

El portavoz remitió a una próxima comparecencia parlamentaria del consejero de Economía y Hacienda, José antonio Griñán, en la sesión de control al Gobierno para evitar dar más detalles, toda vez que el Ejecutivo andaluz considera que "es precipitado adelantar" el debate presupuestario.

Cuando Griñán explicó por primera vez en la Cámara regional sus propuestas de futuro para la legislatura también dejó palmariamente claro su intención de reabrir el debate del cumplimiento de la Disposición Adicional Segunda del Estatutos de Autonomía, bautizado hace años por el andalucista Luis Uruñuela como la deuda histórica.

Esa norma estatutaria dice textualmente: "Dadas las circunstancias socioeconómicas de Andalucía que impiden la prestación de un nivel mínimo en alguno o algunos de los servicios efectivamente transferidos, los Presupuestos Generales del Estado consignarán, con especificación de su destino y como fuentes excepcionales de financiación, unas asignaciones complementarias para garantizar la consecución de dicho nivel mínimo".

Sólo en una ocasión se ha abonado 120 millones de euros por ese concepto. Fue en 1997 y la consignó el último gobierno del socialista Felipe González y la pagó el primero presidido por el conservador José María Aznar.

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Confusas declaraciones

El por qué resurge de nuevo la polémica y las dudas sobre la intención de los socialistas tiene su origen en unas confusas declaraciones del secretario de Organización del PSOE, Luis Pizarro, quien en una entrevista a la agencia Efe retomaba el antiguo discurso socialista de que parte de la deuda histórica ya fue saldada en la época de los Ejecutivos de González. "Reconocemos que mucha de esa deuda que el Estado tiene con Andalucía se ha visto reflejada de una manera positiva en la etapa de los gobiernos de Felipe González y también en los acuerdos que estamos adoptando con el Gobierno de Zapatero".

El portavoz del Ejecutivo autónomo no entró en desmentidos con el dirigente socialista, aunque puntualizó: "Siendo rigurosos que no hay ningún servicio que no se pueda prestar con condiciones mínimas. Es evidente del acercamiento que ha habido" a la media nacional. Y añadió: "En todo caso convendría no confundir el acercamiento con el carácter vigente de la Disposición Adicional Segunda de Estatuto que forma parte de la reivindicación del Gobierno de Andalucía".

Cervera reiteró la tesis del Gobierno andaluz de abrir el debate sobre la deuda histórica en el Consejo de Política Fiscal y Financiera, del que forman parte todas las comunidades del régimen común, el ámbito en el que, a su juicio, deben discutirse la financiación de los "hechos diferenciales" autonómicas ya que afecta "a las arcas del Estado". El Estatuto estipula fijar esos fondos excepcionales de manera bilateral, posibilidad que "no descarta" Chaves.

Cita con Maragall

Manuel Chaves y Pasqual Maragall celebrarán hoy por fin en Sevilla la entrevista que suspendieron en enero pasado a causa de la polémica provocada por la cita del líder de ERC y socio de gobierno de los socialistas catalanes, Josep Lluís Carod Rovira, con la cúpula de ETA.

El encuentro de ambos presidentes socialistas se desarrolla en un "clima de absoluta normalidad", según el portavoz del Gobierno andaluz, Enrique Cervera, quien mostró asombro por "los recelos" que ha levantado el encuentro en el PP. No obstante, la entrevista se desarrolla en un ambiente de cierto barullo por las declaraciones de Maragall acerca de su coincidencia con los contenidos del plan Ibarretxe y de crear un grupo propio de socialistas catalanes en el Congreso, propuestas de las que discrepa Chaves, que es también presidente del PSOE.

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