ERC propone hoy al Congreso que se despenalicen los "actos necesarios" para una "muerte digna"

Esquerra Republicana de Catalunya defenderá hoy en el pleno del Congreso la admisión a trámite de una propuesta para que se despenalicen los "actos necesarios o de cooperación activa" que permitan, proporcionen o faciliten "la muerte digna y sin dolor" de una persona (la eutanasia) "a petición de ésta" ante una enfermedad grave y dolorosa. La ministra de Sanidad, Elena Salgado, ha dicho que la sociedad "no está aún en la idea" de aceptarla.

La diputada por Barcelona de ERC Rosa María Bonàs será la encargada de defender la propuesta. "La voy a presentar independientemente de cómo acaben las negociaciones con el PSOE", dijo ayer a este periódico. Bonàs manifestó que "no comprendía" las reticencias del PSOE, ya que se trata "de la misma propuesta que votaron dos veces a favor en la pasada legislatura".

Fuentes del grupo parlamentario del PSOE confirmaron ayer que iban a votar "inicialmente" en contra de la propuesta porque tienen que ver cómo encaja esta medida en la reforma prevista del Código Penal.

"La vida es un derecho no un deber", afirma el texto. Por eso lo que propone ERC es "despenalizar la intervención médica" para acabar con la vida de una persona con "todos los controles" para asegurarse de que se trata de su voluntad y de que está sufriendo, dijo la diputada.

El proyecto insiste en que se trata de facilitar "la muerte digna y sin dolor a petición expresa, libre e inequívoca en el caso de que sufriese una enfermedad grave que hubiese conducido necesariamente a su muerte o le provocase graves sufrimientos permanentes y difíciles de soportar".

La "eventual y necesaria implicación de terceros y la vulnerabilidad de los procesos" hacen necesario adoptar tantas medidas como sea posible para garantizar la plena libertad de la voluntad". Para ello se modificaría también la Ley General de Sanidad en lo referente al consentimiento informado y se reforzará el testamento vital.

Una portavoz del ministerio de Sanidad recordó unas declaraciones de hace un mes de la ministra Elena Salgado en las que insistía en la importancia de los registros de últimas voluntades para evitar la prolongación artificial de la vida (el llamado encarnizamiento terapéutico), y en que su extensión significa "que se está produciendo un cambio en este sentido". "No es una iniciativa que corresponda a la ministra de Sanidad ni que se vaya a tomar de manera activa", dijo.