_
_
_
_
Crítica:CRÍTICAS
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

'Western' lisérgico

Conviene comenzar por una aclaración: aunque el nombre de la película sea Blueberry, y aunque sea de nacionalidad francesa, la peripecia que cuenta nada tiene que ver con el teniente Blueberry, el osado correo de los cómics nacido también de pluma gala (y protagonista de alguna que otra película). Aquí, sencillamente, estamos en otro terreno: nuestro Blueberry no es militar, sino el sheriff de un remoto poblado llamado Palomito, y aunque estamos en una época similar a la del cómic (la década de 1870), lo que aquí se nos cuenta es radicalmente otra cosa. Y cómo.

En realidad, con su aire de western aparentemente clásico (lo es sólo en sus comienzos), con su trama de venganzas y persecución de un terrible bandido (Madsen) y sus continuos tráficos entre el universo de los blancos y el de los indios, Blueberry arranca como una de tantas películas del Oeste. Lo que la hace progresivamente más extraña, hasta llegar casi al estupor del respetable, es su continuación: héroe entre dos mundos, dos culturas y sobre todo dos sensibilidades, como tantos personajes oscuros del género, el sheriff es en realidad un moderno héroe de cómic, un hombre interiormente quebrado, alguien que tiene dentro un secreto terrible que más que a su perseguido, le concierne prioritariamente a él. Y sólo podrá obtener lo que ansía, la paz interior, si se enfrenta, a un tiempo, al Otro y a sí mismo... Casi nada.

BLUEBERRY

Dirección: Jan Kouen. Intérpretes: Vincent Cassel, Juliette Lewis, Michael Madsen, Temuera Morrison, Ernest Borgnine. Género: western metafísico, Francia-México-Reino Unido, 2004. Duración: 124 minutos.

No es que falten duelos, emboscadas y tiroteos en la película. Pero lo que más abunda (una gentileza del guionista Gérard Brach, compinche desde antiguo del Roman Polanski más metafísico: véase, por ejemplo, El inquilino) es un esoterismo delirante y muy sorprendente: sin tener aparentemente nada que ver con el cine del chileno Alejandro Jodorowsky, lo cierto es que los elementos chocantes están tan presentes como en éste. Y sobre todo el delirio lisérgico: de hecho, el enfrentamiento final no es otra cosa que un duelo amenizado por el peyote, un enfrentamiento de las mentes, más que de los cuerpos..., un cósmico vuelo de ácido.

Película fuera del tiempo y del género, singular producto sin precedentes conocidos, Blueberry pasará a los anales del cine como el primer, y bastante chusco, ejemplo de western psicodélico...

Toda la cultura que va contigo te espera aquí.
Suscríbete

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
RECÍBELO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_