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El PP dejó sin resolver 370.000 expedientes de inmigrantes

La policía desaloja a cientos de indocumentados encerrados en Barcelona para pedir papeles

A un total de 374.749 ascienden los expedientes de extranjeros pendientes de resolver que el Gobierno del PP ha dejado en herencia al nuevo Ejecutivo socialista. En su mayoría, se trata de solicitudes de renovación de permisos de residencia y trabajo. Al cumplirse los plazos sin recibir contestación, miles de inmigrantes que tenían los papeles en regla se han convertido en irregulares. Los empresarios no pueden mantenerles el empleo, pues incurrirían en delito.

Barcelona, con más de 45.000 expedientes en trámite, y Alicante y Madrid, con más de 30.000, son las provincias más afectadas por el colapso administrativo. "Éste es el resultado de una gestión que ha eludido poner en marcha los instrumentos necesarios en un país como España, destino de importantes flujos migratorios", afirma la secretaria de Estado de Inmigración, Consuelo Rumí.

Los responsables de inmigración de CC OO y UGT también atribuyen el problema a la falta de recursos de las oficinas de extranjería. Como medida de choque, el Gobierno ha decidido incorporar 267 funcionarios a las más afectadas. El problema, para Rumí, es similar al de las listas de espera hospitalarias.

Por otro lado, hacia las cuatro de la madrugada de ayer, la policía desalojó a los casi 1.500 inmigrantes que se habían encerrado diez horas antes en la catedral de Barcelona en demanda de "papeles para todos".

El desalojo se produjo en medio de una gran tensión, pero sin violencia, salvo algunos golpes y forcejeos con quienes se resistían a salir del templo. Otros 200 inmigrantes abandonaron voluntariamente la cercana iglesia del Pi. Casi 30 inmigrantes fueron detenidos y posteriormente puestos en libertad.

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