Cuevas quiere reformar la Seguridad Social, pero no desmantelarla

El presidente de la patronal, José María Cuevas, se apartó ayer de las propuestas para desmantelar el Estado de bienestar del vicepresidente del Santander, Alfredo Sáenz, pero advirtió de que su futuro "está en debate" en Europa y que es necesario reformarlo en algunos aspectos. El dirigente de la CEOE incluyó entre esos cambios el sistema de financiación de la Seguridad Social para recortar las aportaciones de los empresarios.

"La cuestión no es desmantelar nada", respondió Cuevas en Santiago de Compostela, tras una reunión del comité ejecutivo de CEOE, cuando los periodistas le preguntaron expresamente por las opiniones del vicepresidente y consejero delegado del banco Santander, Alfredo Sáenz, quien es partidario de "desmontar el Estado de bienestar europeo" y de hacerlo rápidamente.

Cuevas sostuvo que el sistema de protección social español se puede mantener mientras subsista "un ritmo alto de crecimiento de puestos de trabajo". "La cuestión es mantener el sistema de protección social en términos racionales, siempre y cuando no genere un mayor desempleo, que sería peligrosísimo", apuntó el dirigente empresarial. "Si se debilita el empleo, se debilita el sistema".

El máximo dirigente de la patronal advirtió, no obstante, de que el sistema español es "perfectible" y que hay un debate abierto en Europa sobre una posible reforma del Estado de bienestar "para poder competir con Estados Unidos y el sureste asiático". El presidente de la CEOE señaló que una de las posibles reformas debería ser la del sistema de financiación de la Seguridad Social que, a su juicio, descansa en exceso sobre las cuotas empresariales.

Prestaciones mixtas

"No digo que haya que retirar el compromiso de las empresas con el soporte financiero del sistema", explicó el presidente de CEOE, "pero sí revisar qué sistemas de financiación y qué tipo de prestaciones se da con cargo a esas aportaciones". Cuevas agregó que existen "sistemas de prestaciones que se pueden dar con la iniciativa social o empresarial".

Desde el Gobierno, el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, reiteró ayer su defensa del Estado de bienestar europeo y aseguró que el Gobierno "va a garantizar la protección social", velará por ella y la protegerá. En la conferencia de prensa posterior al Consejo de Ministros, Caldera respondía así a las declaraciones de Alfredo Sáenz.

El ministro explicó en Madrid que ni él ni el Ejecutivo comparten la opinión de Sáenz, porque todos los ciudadanos "tienen derecho a la protección social" y el Gobierno, subrayó, "se siente orgulloso, como la inmensa mayoría de los europeos, de esta extraordinaria combinación que se da en Europa entre crecimiento económico y protección social".

Por ello, defendió el ministro, aunque "quizá no podamos alcanzar tanta protección social como ciertos dirigentes empresariales", el Gobierno velará por "el derecho a una educación para todos, a la protección de la salud, a la protección en situaciones de vejez, en desempleo o infortunio".