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Trias denuncia que Clos gastó en publicidad el doble de lo previsto

Mascarell replica que CiU manipula las cifras y las saca de contexto

¿Es progresista y de izquierdas el Gobierno municipal de Barcelona?, se preguntó ayer Xavier Trias, líder de la oposición en el Ayuntamiento. Y él mismo se respondió: no. El presidente del grupo municipal de CiU añadió a continuación lo que le parecen pruebas evidentes de ello: el municipio gasta mucho más en los capítulos de publicidad y protocolo que en atención a los ancianos y otras ayudas sociales. En el apartado publicitario, se preveía una partida de 3,9 millones de euros. Al final fueron 7,84 millones, es decir, el 97% más.

El grupo municipal de CiU se ha pasado varios días haciendo números y comparando los presupuestos del Ayuntamiento barcelonés con la liquidación (lo realmente gastado) anual. Y la conclusión a la que llega es que el equipo de gobierno da prioridad a "gastos superfluos" y lo hace de forma reiterada, es decir, que la desviación al alza de los gastos de publicidad y protocolo se viene produciendo al menos desde hace tres años.

En 2001, el presupuesto de publicidad fue superado en el 56%; el de atenciones protocolarias, en el 54%, y el de reuniones y conferencias, en el 79%. La media de incremento de estos tres apartados se situó en el 56%.

Ocurrió lo mismo, pero de forma más acentuada, en el año 2002, cuando la desviación al alza fue del 158%, con una punta del 174% en el capítulo destinado a publicidad, que pasó a ser de 10,7 millones frente a los 3,7 presupuestados. El pasado ejercicio se cerró nuevamente con desviaciones al alza en estas tres partidas; el incremento fue menor que el de 2002, pero superior al de 2001: del 73%.

Pero no acaban ahí las consideraciones de Xavier Trias. El análisis de los presupuestos de 2003 muestra, a juicio del dirigente de CiU, que las partidas que más consumen son las suntuarias y relacionadas con eventos de escaparate, mientras que no ocurre lo mismo con los gastos sociales. "Es incomprensible que se destinen 10,2 millones a publicidad frente a los 9,8 millones para ayudas a hogares y trabajadores familiares o los sólo 286.000 euros para arreglos en viviendas sociales".

Ferran Mascarell, portavoz del Gobierno municipal, explicó ayer que renunciaba a discutir partida por partida porque las cifras de CiU eran una manipulación ya que sumaban cosas que no tenían nada que ver entre sí.Entre las partidas dotadas por debajo de los gastos publicitarios, Trias señaló el programa de comidas a domicilio (350.000 euros), emergencias sociales (255.000), inserción sociolaboral (78.000) y atención a la inmigración (161.000) y a la mujer (741.000). A Joan Clos, dijo Trias, "debería caérsele la cara de vergüenza" si compara el despilfarro suntuario y publicitario con las dotaciones de los gastos sociales. Trias entiende que haya partidas que puedan consumir más de lo presupuestado, pero insistió en las comparaciones: la Dirección General de Deportes gastó 1,9 millones de euros, el 134% más de los 812.000 euros previstos. Este incremento está vinculados, apuntó, a los campeonatos de natación y a los Juegos de Policías y Bomberos. Frente a ello, la promoción de la práctica deportiva, que tenía un presupuesto de 1,7 millones, gastó el 6,7% menos.

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Trias anotó que los gastos que no alcanzan ni siquiera lo previsto son, en general, los relacionados con el ciudadano. Por ejemplo, la partida de atención a las personas mayores (5,7 millones) acabó en 5,2 millones, es decir, el 8,9% menos. Similar suerte corrieron las dedicadas a atención social, individual y familiar; promoción turística; comercio; mercados; pavimento; nuevas tecnologías, y museos y bibliotecas.

Mascarell aseguró que es radicalmente falso que se haya gastado menos en asuntos sociales y añadió que CiU "hace cada año lo mismo". "Cuando les oigo hablar de vergüenza, no puedo dejar de sentirla yo ante la reiterada falta de recursos políticos que les lleva a falsear cifras, sumando, por ejemplo, publicidad y promoción con información". Según Mascarell, CiU considera publicidad desde los anuncios de concursos públicos a los avisos para que los escolares se apunten a las colonias municipales.

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