Domingo Solans no cree que España viva una burbuja inmobiliaria

Eugenio Domingo Solans, miembro saliente del comité ejecutivo del Banco Central Europeo (BCE) que el 1 de junio vuelve al cargo de consejero del Banco de España, considera que en España no existe una burbuja inmobiliaria. Según Domingo Solans, "debajo de una burbuja hay aire y tras el incremento de los activos inmobiliarios en España no hay aire".

En un almuerzo celebrado ayer en la Embajada de España en la capital alemana se despidió Domingo Solans de la prensa española tras seis años en el BCE. Mirando atrás sin ira, Domingo Solans señaló que el euro ha sido "el cemento de la integración europea" y destacó: "la Constitución se discute con el euro en el bolsillo y esto da una fuerza tremenda a Europa". Domingo Solans, que en el BCE estaba encargado de la emisión de billetes, señaló la importancia de la renuncia a la propia soberanía para llegar a la moneda única.

El todavía dirigente del BCE argumentó que tras la llamada burbuja se encuentra un incremento de la población de 39 a 42 millones en pocos años, la subida del empleo y mejoría del nivel económico de la gente, que se ha traducido en una mayor demanda de vivienda. El euro ha fomentado las inversiones de los extranjeros, que ya no temen a los riesgos de los cambios de cotización de la moneda. A esto se añaden los bajos tipos de interés, que cayeron de un 10% o un 12% hasta el 2%. "No hay aire, sino factores que han empujado los precios", dijo Domingo Solans.

Abordó también el Pacto de Estabilidad y Crecimiento, que, según Domingo Solans, deber ser el marco que da cabida a la confianza, "todos lo tienen que cumplir para beneficiar al conjunto. Es lamentable que países que tenían que dar ejemplo lo incumplan", afirmó.