El Gobierno quiere reducir a un mínimo de 8 festivos al año la apertura de los comercios

El ministro de Industria, Turismo y Comercio, José Montilla, propuso ayer una nueva regulación de horarios comerciales que reduce de 90 a 72 horas semanales la apertura de los comercios y de 12 a 8 el número mínimo de domingos y festivos que se puede abrir. La propuesta, que ha sido mal recibida por las grandes superficies, supone modificar el decreto establecido en 2000 por el Gobierno del PP. A partir de la normativa, las comunidades autónomas pueden fijar sus horarios, pero siempre respetando el mínimo establecido en el decreto.

La propuesta de Montilla reabre un debate espinoso que enfrenta a las grandes superficies con los pequeños comerciantes y, en medio, los gobiernos autonómicos. El anterior Gobierno del PP intentó zanjar el asunto, pero, vistas las chispas que hacía saltar, decidió dejar para más adelante la resolución definitiva de tan polémica cuestión. Hace cuatro años, mediante el real decreto 6/2000 del 23 de junio, se decidió que "la libertad absoluta de horarios y de determinación de días de apertura de los comerciantes no será de aplicación hasta que el Gobierno, conjuntamente con el Gobierno de cada una de las comunidades autónomas, así lo decidan para su correspondiente territorio, y no antes del 1 de enero del año 2005", según el primer artículo del real decreto.

Hasta entonces, el Gobierno del PP pactó lo siguiente: "El horario global en el que los comercios podrán desarrollar su actividad durante el conjunto de días laborables de la semana será, como mínimo, de 90 horas. Los domingos y días festivos en los que los comercios podrán permanecer abiertos al público serán, como mínimo, 9 en 2001, 10 en 2002, 11 en 2003 y 12 en 2004".

Ayer, en el Pleno del Congreso, el diputado socialista Manuel Mas i Estela preguntó al ministro Montilla sobre qué piensa hacer su ministerio cuando se comience a debatir con las comunidades autónomas la liberalización de los horarios comerciales. Tales negociaciones, según se estableció en el real decreto, podrán comenzar a partir del primer día de enero de 2005.

Montilla aseguró que el Gobierno quiere aprobar un "nuevo régimen definitivo" de horarios comerciales, que pasaría por establecer en ocho el número mínimo de aperturas en domingos y/o festivos, cifra que las comunidades autónomas pueden ampliar. El ministro añadió que otros de los ejes sobre los que podría girar, "orientativamente", la nueva normativa son el establecimiento del umbral mínimo de 72 horas semanales de apertura en lugar de las 90 actuales y el mantenimiento de la libertad de horarios, tal y como ya recoge la normativa vigente, para los establecimientos de menos de 300 metros cuadrados.

La reducción de los mínimos, aunque sea potestad de las comunidades autónomas, limita la capacidad de abrir, por lo que no ha sido bien recibido por las grandes superficies. Montilla reconoció que el Gobierno ya ha mantenido contactos con los agentes y los ejecutivos regionales con el fin de que un nuevo y definitivo régimen de horarios comerciales pueda entrar en vigor incluso antes de la fecha prevista para iniciar las negociaciones y subrayó que las comunidades autónomas tendrán "plena libertad" para desarrollar las bases mínimas establecidas por el Estado.

Impulso al UMTS

Por otra parte, Montilla anunció ayer que tendrá listos para antes del verano los nuevos expedientes de modificación de los compromisos de los operadores con licencias UMTS, tales como inversiones a realizar y coberturas mínimas del servicio, para facilitar que los operadores (Telefónica Móviles, Vodafone, Amena y Xfera) pongan en marcha la telefonía móvil de tercera generación este mismo año.