"El periodista ya no sale a la calle, que es donde mejor periodismo se hace"

Rodolfo Serrano (Villamanta, Madrid; 1947) no ha dejado de ser un periodista experimentado a pesar de cambiar de género, o más bien de estirar el que siempre ha cultivado. Un único crimen, su primera novela, es una historia policíaca que funde el reportaje periodístico con la novela negra. Se trata de una continuación de la novela Por encima de toda sospecha, del ex presidente de la Comunidad de Madrid Joaquín Leguina. Afincado en Córdoba como jefe del gabinete de la alcaldesa Rosa Aguilar, Serrano también ha escrito el poemario Especial para cócteles.

P. ¿Ser periodista invita a la novela negra?

R. Sí, porque la novela negra es un reflejo de la realidad y los periodistas lo que hacen cada día es eso. Además, uno de los aspectos más importantes del periodismo de hoy es la sección de sucesos, que es precisamente una crónica negra.

P. En la novela hay guiños a personajes reales y públicos.

R. El guiño viene de la novela de Leguina, que tuvo la originalidad de introducir personajes reales. Yo le doy más énfasis al tema periodístico, con Iñaki Gabilondo o Luis R. Aizpeolea, por ejemplo.

P. Leguina también figura.

R. Sí, es un cameo, un guiño muy particular. Hace de diputado y escritor, nada alejado de la realidad.

P. Ha escrito poesía y ahora novela, ¿con qué se queda?

R. La novela tiene más facilidad que cualquier otro género por el desarrollo de la imaginación y la posibilidad de transformar la realidad que no gusta. Yo he introducido temas de máxima actualidad, como la corrupción política y los malos tratos a las mujeres.

P. ¿Qué otros temas hay?

R. Hay una reflexión periodística que siempre nos hacemos todos los que hemos trabajado en esto. Digamos que no estoy muy conforme con el periodismo que se hace ahora.

P. ¿Por qué?

R. El protagonista de la novela es un periodista veterano que relata con cierta amargura lo mucho que la profesión ha cambiado. El personaje ahonda en que el periodista ya no sale a la calle, que es donde mejor periodismo se hace. Y es que ahora desde la mesa y con un teléfono se hace todo.

P. La novela está escrita a camino entre Madrid y Córdoba.

R. Sí. De Madrid se refleja una guía de tabernas. En Córdoba, que me ha acogido de maravilla, también he reflejado la ciudad y sus bares, con personajes periodísticos, como Juanjo Fernández, o taberneros emblemáticos de la ciudad, como Manolo de El Correo. La alcaldesa también tiene su papel.

P. ¿Qué papel le ha dado a Rosa Aguilar?

R. Es un papel importante porque da un dato crucial para el desarrollo de la novela.