El Príncipe recuerda a los que murieron "por defender los valores democráticos"

Esta vez la cita fue en la Real Casa de Correos, sede de la Comunidad de Madrid. Hasta allí llegó el príncipe de Asturias acompañado de su prometida, Letizia Ortiz, para almorzar con 250 representantes de la vida madrileña. Esperanza Aguirre, la presidenta del Gobierno regional, brindó por la felicidad de la pareja y recordó que el heredero de la Corona y su futura esposa están llamados a convertirse "en símbolo de su unidad" en la España constitucional. El Príncipe tuvo palabras para "los que fallecieron por defender la libertad y nuestros valores democráticos".

Esperanza Aguirre quería que el acto de ayer en la Real Casa de Correos sirviera para que don Felipe y su novia saludaran a una representación de la sociedad madrileña sólo 10 días antes de que contraigan matrimonio en la catedral de la Almudena. Por eso convocó a un almuerzo a 250 personas, entre ellos el delegado del Gobierno, Constantino Méndez; el alcalde de la capital, Alberto Ruiz-Gallardón; el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, Javier María Casas; el fiscal jefe, Manuel Moix; el ex alcalde José María Álvarez del Manzano y los portavoces de la oposición Rafael Simancas (PSOE) y Fausto Fernández (IU).

Al almuerzo asistieron además representantes del mundo de la cultura, de la moda, del deporte -como los presidentes del Real Madrid, Florentino Pérez, y del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo-, del mundo empresarial y del periodismo.

El Príncipe de Asturias y Letizia Ortiz escribieron en el Libro de Honor una dedicatoria. El Príncipe reflejó su "sincero agradecimiento y el de su prometida por la generosa invitación de la Comunidad de Madrid, cuando faltan pocos días para nuestra boda en la catedral de la Almudena". Pero a don Felipe se le olvidó poner la fecha. Fue cuando alguien le advirtió de lo sucedido, miró su reloj y comprobó que sólo le quedan 10 días para perder su soltería. El Príncipe ya había estado en la sede de la Comunidad de Madrid, pero Esperanza Aguirre quiso enseñarles algunas de las novedades que ella ha introducido tras llegar a la presidencia. En la sala donde se celebran las reuniones del Gobierno regional había una sorpresa: el cuadro del pintor Pablo Palazuelo que la Comunidad regala a la pareja por su boda. A don Felipe el cuadro le sorprendió por sus grandes dimensiones y por su colorido: "Tiene mucha fuerza", comentó. Letizia Ortiz observó que Palazuelo es uno de los pintores preferidos del Rey.

Ya en los salones de la planta baja la pareja saludó a los invitados y habló de los últimos preparativos. El Príncipe sigue preocupado por el tiempo que el día 22 hará en Madrid. Ayer se le pudo ver mirando de vez en cuando el cielo plomizo que estos días hay en la capital. Pero don Felipe ha desvelado que ya le han dicho que es muy probable que el día de su boda haga sol, aunque por la tarde lloverá. Los actos del enlace están previstos que concluyan a las cinco de la tarde y hasta esa hora parece garantizado el buen tiempo.

Antes de comenzar el almuerzo, Esperanza Aguirre alzó la copa para brindar por la felicidad de la pareja. Aguirre dijo que el heredero y su futura esposa están llamados a convertirse "en símbolo de unidad" en la España constitucional. La presidenta añadió: "Los madrileños queremos ser los primeros en felicitaros y en mostraros toda nuestra lealtad a la Corona, que es lo mismo que mostrarla al proyecto sugestivo de vida en común que es España".

El Príncipe de Asturias respondió a Aguirre brindando "por el bienestar, el progreso de Madrid, sin olvidar a los que fallecieron por defender la libertad y nuestros valores democráticos".

En la mesa en la que se sentaba la pareja estaban, entre otros,además de la presidenta, el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, y el portavoz socialista Rafael Simancas. Durante el almuezo se habló de casi todo, según los presentes, desde los preparativos de la boda a la relación de Simancas con la infanta Cristina, compañera suya en la Facultad de Políticas, y todos sonrieron cuando Letizia descubrió que en los tarjetones que anunciaban el menú su nombre estaba escrito con ce y no con zeta. También hubo tiempo para que Esperanza Aguirre y Rafael Simancas hablaran de los problemas de la Sanidad, de la ley de calidad educativa y de otros temas que les enfrentan. Letizia Ortiz se mostró muy informada de la actualidad madrileña. "Se nota que aunque discrepan ustedes dos mantienen una buena relación personal", les dijo la prometida del Príncipe.

Don Felipe y su novia se marcharon de allí a los toros.