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Los pescadores de Isla Cristina dicen que en todos los puertos del golfo de Cádiz se cometen ilegalidades

El patrón mayor de la Cofradía de Pescadores de Isla Cristina (Huelva), Mariano García, aseguró ayer que en todos los puertos pesqueros de la provincia de Cádiz, y en todas las modalidades de captura, se cometen "ilegalidades". García señaló que en algunos puertos gaditanos los inspectores están amenazados por los pescadores. "En puertos donde se concentra mucho pescado inmaduro no dejan entrar a los inspectores. Se atreven incluso a tirar al agua a los inspectores si acceden al barco. Se ha dado el caso de que los tripulantes han cortado las amarras de las patrulleras. No voy a dar nombres, pero las administraciones lo saben", aseguró.

García respondió ayer con esa rotundidad a las acusaciones de los pescadores de Barbate (Cádiz) y de Punta Umbría (Huelva), que aseguran que los marineros de Isla Cristina capturan el boquerón con barcos de arrastre, una práctica prohibida. El boquerón debe ser capturado mediante la modalidad de cerco, según la legislación. De las 250 embarcaciones del puerto de Isla Cristina, un total de 105 son de arrastre, frente al 90% de los barcos de los puertos de Barbate y de Punta Umbría que son de cerco.

García afirmó que existen barcos de cerco que "también capturan especies para las que no están autorizados". Este pescador explicó que el boquerón es una especie migratoria que a su paso por aguas de Isla Cristina queda atrapada en las redes de los barcos de arrastre. No obstante, los pescadores están obligados a devolverlos al mar, aunque una vez en la red estén muertos, según indicó Mariano García. Y añadió: "El puerto de Isla Cristina recibe a diario la visita de un total de 20 inspectores entre agentes de ambas administraciones, la central y la autonómica, Guardia Civil y Seprona, y nunca encuentran nada anormal. No sé donde están esas irregularidades que denuncian".

García afirmó que el enfrentamiento mantenido entre los pescadores que faenan en el golfo de Cádiz se debe a una cuestión de fondo, que trasciende a la pesca ilegal del boquerón por barcos de arrastre: "Venimos desde hace tiempo advirtiendo a las administraciones de que el golfo de Cádiz se encuentra mal y que las irregularidades que se cometen deben ponerse sobre la mesa para que entre todos encontremos una solución al problema". García indicó que ese caladero está sobreexplotado. En el golfo de Cádiz faenan actualmente unos 700 barcos de todas las modalidades, pero además se han incorporado, tras finalizar el acuerdo de pesca con Marruecos, otras 60 embarcaciones, que tradicionalmente faenaban en aguas marroquíes y algunos barcos procedentes del Mediterráneo.

El presidente de la Asociación de Armadores de Isla Cristina, Sebastián Carrillo, señaló que la solución pasa por que las administraciones establezcan unos horarios de pesca para todas las modalidades y dos meses de parada biológica.

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