EE UU anuncia el juicio contra los soldados torturadores
Conscientes del inmenso destrozo que el escándalo de las torturas a los presos iraquíes ha causado a la ya deteriorada imagen de Estados Unidos en el mundo árabe, Washington se propone empezar a restañar los daños sin demora. El general Mark Kimmitt anunció ayer en Bagdad que el miércoles de la próxima semana comenzará el primer juicio, en una corte marcial en la capital iraquí, contra el policía militar de 24 años Jeremy Sivits, acusado de maltrato a los detenidos, entre otros cargos. Es muy dudoso que el empeño tenga éxito porque en los países de Oriente Próximo -sobre todo después de la ausencia de juicio para cientos de "combatientes enemigos" detenidos en Guantánamo- la desconfianza es casi unánime.
Sivits será el primero de los siete militares norteamericanos que serán juzgados por torturas a los prisioneros en las cárceles de Irak, especialmente en la de Abu Ghraib, a escasos kilómetros al oeste de Bagdad, que fue patíbulo de miles de personas durante el régimen de Sadam Husein. Según el portavoz militar, el proceso será abierto al público. "No es nuestra intención esconder nada", aseguró Kimmitt. No precisó el general si se permitirá el acceso a las cadenas de televisión.
Bomba contra un hotel
Y mientras, los episodios de violencia se multiplican en Irak. Una bomba mató ayer al menos a cinco personas, tres de ellas policías, en un repleto mercado del distrito de Bayya, al sur de Bagdad, donde viven tanto suníes como chiíes. Trece transeúntes fueron heridos, informa Reuters. Un convoy militar norteamericano acababa de pasar por el lugar de la explosión, pero no está claro a quién estaba dirigido el atentado.
Cerca de la pasada medianoche, una bomba explotó frente al hotel Four Seasons, en el centro de Bagdad, y causó heridas al menos a seis personas de nacionalidad británica, según informaron fuentes policiales iraquíes.
En el hotel objetivo del atentado se hospedan contratistas extranjeros que trabajan en Irak, principalmente en tareas de seguridad. Según fuentes del hotel, la onda expansiva destrozó las instalaciones del bar donde se encontraban los seis heridos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
Archivado En
- Revueltas sociales
- Ocupación militar
- Terrorismo internacional
- Prisioneros guerra
- Cárceles secretas
- Tortura
- Guerra Golfo
- Irak
- Cruz Roja
- Acción militar
- Malestar social
- Integridad personal
- Derechos humanos
- Víctimas guerra
- Estados Unidos
- Lucha antiterrorista
- Partidos políticos
- Conflictos políticos
- Oriente próximo
- Defensa
- Juicios
- Guerra
- Asia
- Terrorismo
- Conflictos