El obispo de Castellón convierte la homilía del día de la patrona en un acto contra el PSOE

El obispo de la diócesis Segorbe-Castellón, Juan Antonio Reig Pla, aprovechó ayer la celebración del día de la patrona de la capital de La Plana para arremeter contra la intención del Gobierno de mantener la asignatura de religión como una optativa más no evaluable para pasar de curso. Al menos dos veces, Reig llamó "bárbaros" a los que rechazan la obligatoriedad de la asignatura de religión católica. El PSPV y el Bloc calificaron de "mitin" la homilía del obispo.

La decisión del Ejecutivo que lidera José Luis Rodríguez Zapatero de modificar la Ley Orgánica de Calidad de la Educación (LOCE) del PP, que obligaba a elegir entre religión católica o hecho religioso indigna al obispo. "Bárbaros" es el calificativo que utilizó Reig Pla, al menos en dos ocasiones, para referirse a los que no defienden que la asignatura de la religión católica sea obligatoria. La homilía, independientemente del acuerdo o no sobre su contenido, causó malestar entre algunos de los asistentes a la misa pontifical en honor a la Mare de Déu del Lledó por el momento y las formas utilizadas por el obispo, que presidía el acto de conmemoración con motivo del día de la patrona de Castellón. El presidente del Consell, Francisco Camps, y el de la Diputación, Carlos Fabra, asistieron a la misa, al igual que la mayoría de los concejales del Ayuntamiento. Los grupos de la oposición, socialistas y el Bloc, mostraron su desacuerdo con la "utilización" de una celebración que va más allá de la fiesta religiosa. "Ha sido un mitin", dijeron el socialista Ignacio Subías y el edil nacionalista Enric Nomdedéu. Los dos partidos coincidieron en manifestar que permanecieron en el templo por educación, ante lo que consideraron "insultos" proferidos por Reig.

Por el contrario, el concejal del PP Miguel Ángel Mulet aprobó el discurso del obispo, el momento elegido y los argumentos. El obispo nunca se ha caracterizado, desde que tomara posesión de su cargo, por su tibieza y diplomacia a la hora de defender los dogmas de la iglesia católica. En esta ocasión, aprovechó el día de la patrona de la capital de La Plana y la publicidad que otorga la retransmisión de la misa, difundida por el canal público autonómico, para arremeter contra los cambios anunciados respecto a la asignatura de la religión.

Reig Pla habló también de otros temas, como el aborto, y rechazó que los homosexuales o personas sin pareja puedan garantizar una buena educación para niños adoptados. Sin embargo, fue el trato a los cambios anunciados por el Gobierno socialista en la asignatura de la religión católica en los colegios lo que provocó mayor revuelo. "Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española", dice la Constitución. Frente a ello, el obispo de Segorbe-Castellón no sólo calificó de "bárbaros" a los contrarios a que se imparta, obligatoriamente, la asignatura de la religión católica, sino que, según algunos testigos, lamentó que la Constitución Europea no recoja las raíces de la civilización cristiana.

Para el portavoz del grupo socialista, Ignacio Subías, al margen del contenido, sobre el que también quiso demostrar su desacuerdo, y de la "libertad del obispo para manifestar su postura", Juan Antonio Reig Pla "equivocó el sitio y el momento". "Una misa de estas características trasciende el ámbito religioso", sostuvo Subías, quien calificó de "falta de respeto" las palabras del sermón. "Existen muchos domingos y muchas iglesias para manifestar su parecer", añadió. El portavoz socialista destacó que, por contra, le hubiera gustado oír al obispo hablar "de paz y libertad", cosa que, según dijo, no hizo.

Para el edil del Bloc, Enric Nomdedéu, el momento también fue equivocado ya que, la celebración del día de la patrona "va más allá del fervor mariano". "Yo no tengo por costumbre insultar a mis invitados así que me plantearé el volver a casa de este señor que me ha insultado", añadió.