Zapatero y el líder socialista francés rechazan la política de Bush en Oriente Próximo

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el secretario general del Partido Socialista Francés (PSF), François Hollande, coincidieron ayer en rechazar la política de George Bush en Oriente Próximo así como en considerar el riesgo de que la falta de control en Irak pueda llevar a Estados Unidos a demorar la entrega de la soberanía a este país.

El secretario general del PSF expresó su "total apoyo" a la decisión de Zapatero, manifestada el domingo, de ordenar el repliegue inmediato de las tropas españolas desplegadas en Irak y reveló que ambos políticos coincidieron en que "Bush ha puesto en peligro el equilibrio en el mundo con la guerra de Irak".

El hecho de que el primer encuentro de Rodríguez Zapatero, como presidente del Gobierno, con un mandatario extranjero en La Moncloa sea con Hollande muestra la especial sintonía existente entre el Gobierno socialista español y el socialismo francés en la oposición. Esa sintonía no se limita a la situación internacional, sino que se extiende a la visión común sobre la renovación del socialismo de Zapatero y Hollande.

"Humildad, transparencia y acercamiento a la ciudadanía son las claves de la renovación del socialismo", dijo el secretario general del PSF a modo de resumen, al final del encuentro con el presidente del Gobierno. La privilegida relación que mantienen los socialismos francés y español se reflejará en el acto político conjunto que celebrarán en mayo Zapatero y Hollande en Tolouse, sur de Francia, en el marco de la precampaña de las elecciones europeas.

Buena aceptación

Pero la parte principal de la reunión, de hora y media de duración, se centró en la situación de Irak y Oriente Próximo. Hollande, en apoyo de la decisión del presidente del Gobierno español, aseguró que "ha llegado el momento del repliegue de todas las tropas, no sólo las españolas". Tras recordar que ha encontrado "muy buena aceptación" en la opinión pública de España y Francia la retirada de las tropas españolas, apuntó que la solución al "caos de Irak" pasa por que la ONU tome la iniciativa política.

El secretario general del PSF insistió en que "es preciso devolver pronto la soberanía a los iraquíes, incluidas las competencias policiales", pues "Estados Unidos no puede dominar la situación" en el país. Una situación que, en sintonía con el presidente del Gobierno español, calificó de "caos total" con el riesgo añadido de una "escalada de la violencia" ante el "descontrol de la situación".

Zapatero y Hollande abordaron también el reto del terrorismo islamista y coincidieron en la necesidad de integrar a la comunidad musulmana y a su religión para mejor aislar al fundamentalismo y al fanatismo.