Acebes anunció el plan especial antiterrorista antes de elaborarlo
El 17 de marzo, el ministro de Interior, Ángel Acebes, anunció la puesta en marcha de un vasto plan de seguridad ante "la persistencia del riesgo terrorista" tras el 11-M. Ese mismo día, las 31 comisarías dependientes de la Jefatura Superior de Policía de Madrid recibieron una llamada telefónica de mandos del cuerpo en las que se pedía que redactaran un informe sobre posibles objetivos terroristas y los dispositivos necesarios para protegerlos. Es decir, que el plan fue anunciado antes de que estuviera cerrado, según varias fuentes policiales.
El ministro aseguró que el plan suponía aumentar el número de policías que ya estaban desplegados antes de la matanza, algo que sonó extraño en algunas comisarías de Madrid, ya que, pese a tener eventuales objetivos terroristas, no habían notado ningún incremento de la seguridad por parte de la Dirección General o de la Jefatura Superior de Madrid.
La sorpresa fue máxima cuando los comisarios de Madrid recibieron una llamada telefónica de sus mandos zonales, en la que se les pedía que redactaran "a la mayor brevedad" un informe con los objetivos terroristas que tenían en sus respectivos distritos o municipios, así como que cuantificaran el número de efectivos necesarios para vigilarlos. No se especificó en ningún caso, según las citadas fuentes, ni quién llevaría a cabo las vigilancias de esos puntos calientes ni si las comisarías deberían encargarse de ello.
Entre los objetivos que deberían incluirse en el citado informe estaban "todos los susceptibles" de ser objetivo terrorista. "Eso es demasiado amplio y una ciudad como Madrid incluye todo tipo de instalaciones, desde un hotel hasta una estación de metro o un intercambiador de transportes", explicaron algunos mandos policiales.
Entrega en mano
Los mandos exigieron que dichos informes, sobre los que no existía un cuestionario previo, debían estar a las 18.00 del día siguiente en la Jefatura. Pero no se podían remitir por fax o por correo electrónico, sino que tenía que ser entregado en mano, según fuentes policiales. Para entonces, Acebes ya lo había vendido a la opinión pública.
Un portavoz de la Jefatura Superior de Policía de Madrid declinó hacer comentarios sobre la puesta en marcha en la comunidad madrileña del plan especial. Fuentes policiales reconocieron esta semana que la capital dispone ahora de una gran presencia policial, sobre todo en los nudos de transportes o en los lugares de gran afluencia de público, como partidos de fútbol o grandes superficies comerciales. Además, los policías antidisturbios están efectuando controles nocturnos esporádicos a conductores en distintos puntos de la capital de España.
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