Interior aísla a los presos islamistas para protegerlos
La Dirección General de Instituciones Penitenciarias, dependiente del Ministerio del Interior, decidió el pasado domingo aplicar las medidas oportunas a los 33 reclusos encarcelados por su presunta pertenencia a la organización terrorista islámica Al Qaeda, del Grupo Islamista Argelino (GIA) y a grupos salafistas.
Todos estos detenidos se encuentran en régimen de prisión preventiva, decretada por el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón. En total son 26 los presuntos integrantes de la organización terrorista recluidos, incluido Abderramán Ahmed, el recién extraditado desde la base norteamericana de Guantánamo (Cuba), presuntamente vinculado a la organización terrorista islámica.
A éstos, además, habría que sumar otros cinco miembros que cumplen actualmente condena por haber sido probada su vinculación al Grupo Islamista Argelino (GIA), y a grupos salafistas. Los 33 reclusos están mayoritariamente en prisiones de la Comunidad de Madrid (Soto del Real, Aranjuez y Valdemoro). Un portavoz de Instituciones Penitenciarias indicó ayer que el aislar a estos reclusos obedece sólo a "razones preventivas". Negó que se hubieran producido "altercados entre los reclusos", ni detectado ningún comportamiento hostil por parte de otros reclusos.
Las medidas adoptadas por Interior suponen que estos 33 internos lleven un régimen de vida en la prisión "separada del resto de los presos". Desde el domingo salen al patio solos, comen en sus celdas, acuden al médico en solitario, y las entrevistas con sus abogados se celebran ante la presencia de los funcionarios de prisiones.
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