Los árboles no le dejan ver Urdaibai

Durante la primera semana de febrero, un equipo de operarios de la Diputación Foral de Bizkaia procedió a tronchar y podar de forma salvaje e indiscriminada el bosquete autóctono de ribera que se encuentra bajo el mirador de Portuondo en el municipio de Mundana.

La acción ha afectado a decenas de cerezos silvestres, robles, hayas y acacias situados bajo el mirador y, según testigos, se ha realizado con el fin de permitir las vistas del conjunto del estuario para los usuarios del mirador. En cambio, según técnicos consultados, la poda realizada no soluciona de manera alguna el problema de vistas, dado que en breve los árboles truncados que sobrevivan a la masacre desarrollarán un ramaje que impedirá, más si cabe, las visión de 180 grados sobre el estuario que pretende la Diputación y los promotores del desaguisado.

Asimismo los citados técnicos, además de afirmar que la acción supone una agresión para el arbolado intervenido y una trasformación antinatural del paisaje natural, contraviene las técnicas de jardinería al uso y, por ejemplo, las conclusiones de la escuela Agraria Mandikoi de Arkaute o de la Asociación Española, en la Jornada de Arboricultura celebrada en Vitoria-Gazteiz en 2003.

Los firmantes afirmamos que la acción de poda incumple la normativa vigente en la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, al realizarse en una zona de Protección P4 de protección de riberas y bosques naturales, sin la oportuna autorización del Patronato de la Reserva y en contra de las disposiciones del PRUG para estas zonas. Asimismo habrá que recordar a la Diputación que la carretera comarcar Gernika-Bermeo es una vía calificada de itinerario de interés naturalístico y paisajístico en el propio Plan de Carreteras de Bizkaia, que le impone unas acciones respetuosas con el entorno natural de la misma.

Si el móvil del presente crimen es mejorar la percepción del paisaje de la reserva por parte de los vecinos y visitantes, animamos a la Diputación a retirar de la vista la edificación de la llamada Máquina de Escribir de Laida o el palacete ilegal de seis alturas del señor Ardanza, ambas visibles desde Portuondo. Asimismo nos preguntamos si esta pasión arbolicida de la Diputación se aplicará en breve a toda la red de carreteras de Urdaibai, donde plantaciones de pinos insignis o eucaliptos invaden en innumerables puntos -tanto en suelo como en vuelo- los tres metros de cada lado de las carreteras forales con evidente afección a la seguridad.

Aun mantenemos la esperanza de que en breve la Diputación de Bizkaia deje de actuar en la Reserva de La Biosfera de Urdaibai como si esta no existiera, o como sí no les afectara como administración la inclusión de gran parte de nuestra comarca como zonas ZEPA o como Lugares de Interés Comunitario. Igualmente esperamos que el órgano ambiental del Gobierno vasco imponga las sanciones previstas en la Ley de Urdaibai a los responsables de este acto y deje de actuar de distinta forma si se trata de un particular o de la Diputación de Bizkaia.