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El talibán español condena ante Garzón los atentados del 11-S

El juez envía a la prisión de Soto del Real a Hamed Abderramán

Hamed Abderramán Ahmed, el talibán español que ha estado dos años preso en la base norteamericana de Guantánamo, declaró ayer ante el juez Baltasar Garzón que Al Qaeda es una organización "terrorista y criminal". Abderramán repudió los actos terroristas y condenó expresamente los atentados del 11 de septiembre de 2001 contra las Torres Gemelas de Nueva York y contra el Pentágono.

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Los informes médicos elaborados por los forenses de la Audiencia Nacional y por el Hospital Gregorio Marañón precisan que Abderramán se encuentra sano, tanto desde el punto de vista físico, como desde el psicológico. El juez Garzón, después de tomarle declaración, decidió ingresarle en la prisión madrileña de Soto del Real, en lugar del ala penitenciaria del citado hospital, donde ha permanecido desde que llegó a España.

Hamed Abderramán, que vestía un jersey azul marino de ochos, tejanos negros y zapatillas deportivas, declaró durante casi tres horas ante el magistrado, asistido por sus letrados Javier Nart y Marcos García Montes. El ceutí, con barba, relató al juez que no pertenece ni ha pertenecido a Al Qaeda y que no tiene vinculación alguna con ninguna organización terrorista. Relató también su "infierno" en Guantánamo y precisó que los norteamericanos, cuando abandonó la base para ser trasladado a España, le hicieron firmar un documento en el que se hace constar que no pertenece a Al Qaeda y se le advierte de que sería detenido de nuevo si se comprobase que ha financiado a la organización terrorista.

La defensa explicó que tienen intención de solicitar el documento por comisión rogatoria y que la semana próxima pedirán la libertad de Abderramán.

En su declaración ante Garzón, Hamed Abderramán señaló que en 1997, junto a un amigo llamado Abdullah al que conocía de la mezquita de Ceuta, formó un grupo fundamentalista con otros cinco o seis amigos. En mayo de 1998, Abdullah marchó a Afganistán y le dijo que, si quería contactar con él, lo hiciera a través de otro amigo llamado Ibrahim. La policía sospecha que Ibrahim era el contacto con los talibanes y la red española de Al Qaeda.

En julio de 1998, viajó a Pakistán y de allí a una madrasa (escuela fundamentalista musulmana) en la frontera con Afganistán, pero tras los atentados del 11-S, el mulá Omar, nervioso, ordenó la salida de todos los extranjeros. Él viajó con un grupo por las montañas hasta Jalalabad (Afganistán), donde en un bombardeo falleció Abdullah. Luego fue detenido y, tras dos meses en Afganistán, fue trasladado a Guantánamo. Estuvo en tres campos distintos. El primero el Rayos X, preso en una celda de dos metros por dos metros; luego pasó al campo Delta, donde estuvo desde abril de 2002 a junio de 2003 y finalmente en otro campo para reponerse antes de ser entregado.

Por otro lado, el juez Guillermo Ruiz Polanco, ordenó el ingreso en prisión de Khaleb Madani, detenido en Murcia por su relación con Al Qaeda. Moussa Laouar, detenido en Torrevieja (Alicante), también ingresó en prisión.

El juez Garzón, ayer, a su llegada a la Audiencia Nacional.
El juez Garzón, ayer, a su llegada a la Audiencia Nacional.EFE

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