El PSOE reclama 100 agentes tutores y 48 educadores sociales para atajar el absentismo escolar

El grupo municipal socialista considera que los 2.750 casos de absentismo escolar atendidos el año pasado en la capital a través de un convenio entre el Ayuntamiento y la Comunidad son sólo la punta del iceberg de un problema que afecta, sobre todo, a los estudiantes de los barrios más humildes. Por eso, en el pleno municipal del próximo viernes reclamará que se destine más personal para detectar y atender los casos ahora ocultos. Exige una plantilla de 100 agentes tutores, frente a los 39 que hay en la actualidad, y de 48 educadores sociales (ahora son 24).

Rafael Merino, concejal socialista responsable de temas educativos, también pide al Ayuntamiento que tome cartas en el asunto para impedir que niñas gitanas o magrebíes sean sacadas del colegio antes de los 16 años, cuando finaliza la etapa de escolarización obligatoria, para casarse o cuidar de sus hermanos pequeños.

"Según los datos del propio gobierno municipal, el 41% de los 2.750 niños absentistas atendidos el año pasado eran chavales gitanos de ambientes desfavorecidos, sobre todo niñas, y nosotros también hemos detectado casos de chiquillas magrebíes. Hay que dejar de hacer la vista gorda sobre este tema y dedicar todos los esfuerzos para que esas niñas sigan sus estudios", apostilla el edil. "Quizá la vía para lograrlo sea llegar a acuerdos con asociaciones de sus propias comunidades", reflexiona Merino, aunque en su propuesta al pleno no descarta medidas más expeditivas, como restringir las ayudas públicas a las familias que saquen a sus hijas del colegio sin acabar los estudios.

Malika Abdelaziz, coordinadora del área de mujer de la Asociación de Trabajadores Inmigrantes Marroquíes en España (ATIME), reconoce que se dan casos de niñas magrebíes retiradas de la escuela por sus propios padres antes de los 16 años. Pero puntualiza que "apenas hay datos fiables sobre ellos" y cree que se trata de "situaciones puntuales". "La mayoría de las niñas marroquíes en España finaliza la escolarización obligatoria y, si pueden, siguen estudiando. Las que sacan a sus hijas de clase suelen ser familias del campo, que actúan así porque mantienen valores muy tradicionalistas y patriarcales, y no por razones religiosas. El islam no impide estudiar a nadie", añade Abdelaziz.

Los socialistas también proponen la apertura de un centro de atención psicopedagógica para muchachos que, tras abandonar la escuela, han empezado a cometer pequeños delitos.