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Lula destituye a un alto cargo por un escándalo de corrupción

El Partido de los Trabajadores recibió dinero de las apuestas ilegales

Juan Arias

Un escándalo de corrupción política zarandea por primera vez el Gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva, que había nacido bajo el signo de la renovación ética de Brasil. Una cinta de vídeo, cuyo contenido ha hecho público el diario Época, revela que Waldomiro Diniz -subjefe de Asuntos Parlamentarios de la Presidencia de la República y hombre de confianza del poderoso ministro de la Casa Civil, Josè Dirceo, brazo derecho de Lula- estaba presuntamente involucrado, desde los años noventa, en una red de corrupción para financiar campañas electorales de políticos del Partido de los Trabajadores (PT), la formación fundada por Lula y que lo llevó al poder el año pasado. Apenas salió a la calle la revista, Lula destituyó fulminantemente a Diniz, quien había pedido dejar el cargo ante la evidencia del contenido del vídeo.

La cinta muestra como Diniz, entonces director de las Loterías, pide dinero a Carlos Augusto Ramos, Bicho, investigado desde hace años por su participación en las apuestas ilegales. Los fondos se destinaban a financiar campañas de políticos del PT. A cambio, el ex asesor de la Presidencia ofrecía apoyo a Bicho para ganar concursos relativos a la lotería.

Los medios de comunicación titularon ayer que el Gobierno de Lula "había perdido su virginidad". La columnista política del diario O Globo escribió que el Gobierno había recibido "un tiro en el pecho", ya que el incriminado era el asesor y hombre de confianza del ministro Dirceo y quien le tejía en el Parlamento las relaciones con los diputados para captar votos que permitieran la aprobación de las propuestas del Ejecutivo.

Apretón de manos

Diniz recopiló dinero para la ex ministra negra Benedita da Silva y para la actual gobernadora de Río, Rosinha Matheus. Y también para él mismo. El ex asesor aparece en el vídeo dando un apretón de manos al Bicho.

Lula ha pedido al ministro de Justicia, Thomas Bastos, que se abra inmediatamente una investigación judicial para que el Ejecutivo quede cuanto antes limpio de toda responsabilidad. El presidente del PT, Josè Genuino, ha intentado desligar al partido de cualquier responsabilidad. Asegura que Diniz nunca fue afiliado al PT. Sin embargo, éste era amigo personal de Dirceo desde los años noventa y habían compartido piso durante dos meses. Cuando el PT ganó las elecciones y Dirceo pasó de ser presidente del partido a ministro de la Casa Civil, se llevo de Río a Brasilia a Diniz como asesor.

Las revelaciones de Época aparecieron el viernes pasado, día en que el PT festejaba en Río de Janeiro los 24 años de la fundación del partido. Lula, que ya sabía que el escándalo se comentaba en todas las redacciones de los diarios, elogió públicamente a Dirceo, que fue muy aplaudido.

La oposición ya ha pedido la cabeza de Josè Dirceo. Alega que por escándalos menores algunos ministros del ex presidente Fernando Henrique Cardoso habían tenido que dejar sus cargos. La oposición ha reclamado también la creación inmediata de una comisión de investigación en el Parlamento.

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