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LA POSGUERRA DE IRAK

La Internacional Socialista pide en Madrid el fin de la ocupación

Soledad Alcaide

El Consejo de la Internacional Socialista, reunido en Madrid, aprobó ayer una resolución sobre Irak, en la que reclama la urgencia de "poner fin a la ocupación militar" de ese país y promover "un profundo cambio en el proceso de transición" que se está llevando a cabo tras el final de la guerra.

Para ello, abogó por organizar una fuerza multinacional en Irak "bajo la autoridad de la ONU involucrando a los países árabes". Además, indicó que Naciones Unidas debe tener "la total y efectiva responsabilidad por la transición y reconstrucción en Irak".

La resolución fue aprobada por mayoría, aunque con la abstención de los partidos socialistas de algunos países, entre ellos el Partido Laborista británico. Antes, el presidente de la Internacional Socialista, António Guterres, había pedido a sus compañeros que procuraran no presentar enmiendas al texto, para no reabrir el debate.

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Porque la discrepancia respecto a Irak se había visto ya el sábado, durante la discusión del panel Asegurando un futuro democrático para Irak. Fue el retrato de cómo en una organización las posiciones dependen más de las nacionalidades que de una visión común y, sobre todo, de si en su país de origen el partido socialista está en el poder o se encuentra en la oposición.

Así, se escuchó al primer ministro iraquí para el área kurda, Barham A. Salí, de la Unión Patriótica del Kurdistán, plantear una "reivindicación moral para la comunidad internacional" que les había liberado, en la que incluyó a España, como parte de la fuerza militar. "Creo que el mundo debería haber actuado antes. La guerra ha llegado tarde para muchos inocentes", apostilló.

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La frase le vino como anillo al dedo al viceministro de Asuntos Exteriores británico, Denis McShane, quien la aprovechó para recordar lo difícil que resultó encontrar apoyo para intervenir en Irak. Y justificó la guerra asegurando: "El arma de destrucción masiva más importante que tenía Irak se llamaba Sadam Husein".

En la posición opuesta se mostró el turco Denis Baikal, quien aseguró que la intervención "no ha alcanzado sus objetivos, sino que al contrario ha creado enfrentamientos, poniendo en peligro el tejido social iraquí". O el estadounidense Skip Roberts, quien denunció que su país "está privatizando Irak sin control, incluso cosas que no se pueden privatizar en EE UU".

Pero la más aplaudida fue la española Micaela Navarro, cuando recriminó, con indignación, a Barham A. Salí que dijera que la intervención tenía que haber llegado antes: "La violencia nunca se puede combatir con violencia. Una guerra nunca está justificada. Es el fracaso de la política. Y los que estamos aquí somos políticos".

El chileno Luis Ayala y el portugués António Guterres, ayer, en la Internacional Socialista en Madrid.
El chileno Luis Ayala y el portugués António Guterres, ayer, en la Internacional Socialista en Madrid.SANTI BURGOS

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Sobre la firma

Soledad Alcaide
Defensora del Lector. Antes fue jefa de sección de Reportajes y Madrid (2021-2022), de Redes Sociales y Newsletters (2018-2021) y subdirectora de la Escuela de Periodismo UAM-EL PAÍS (2014-2018). Es licenciada en Derecho por la UAM y tiene un máster de Periodismo UAM-EL PAÍS y otro de Transformación Digital de ISDI Digital Talent. 

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